Las temperaturas subirán esta semana de forma 'escandalosa' ya que hasta el jueves aumentarán unos 10 grados respecto al pasado domingo, por lo que se alcanzarán valores veraniegos después de haber tenido el mercurio en niveles inferiores a los normales para estas fechas, según se destacó ayer desde la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). El tiempo veraniego comenzará así a asomarse esta semana en todo el país, después de un largo periodo de temperaturas desapacibles que los meteorólogos achacan a la alta variabilidad atmosférica.
A partir de hoy las temperaturas en conjunto comenzarán a ascender y se superarán los 30 grados en todo el país, aunque el domingo se prevé una recaída, según explicaba ayer el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Alejandro Lomas.
La borrasca fría responsable de las lluvias persistentes caídas en el norte durante este fin de semana -sobre todo en Navarra y País Vasco- se aleja y hay una tendencia 'clara' de mejoría. Sin embargo, a finales de semana podría haber un empeoramiento, aunque nunca una vuelta al invierno.
Sobre lo sucedido en las últimas 48 horas en Navarra, donde las lluvias causaron desbordamiento de ríos y numerosos problemas viarios, Lomas indicó que la situación generada por un sistema frontal asociado a una borrasca, 'casi estacionaria', no estuvo prevista en toda su dimensión. 'Los modelos numéricos no fueron capaces de apreciarlo; este tipo de situaciones no las calculan bien y tienden a infravalorarlas'; incluso 'es normal que en ocasiones varíe el doble o triple' de lo esperado, añadió, descartando que sin embargo se pudiese hablar de falta de previsión.
ALGUNAS 'DESVIACIONES'
Al respecto, el portavoz de la Asociación de Comunicadores de Meteorología (Acomet), José Miguel Viñas, coincidió en que los modelos numéricos todavía no son tan finos y, en ocasiones, 'se producen este tipo de desviaciones'. En este caso, además, las consecuencias empeoraron porque el suelo ya estaba muy saturado y los caudales de los ríos estaban llenos lo que acabó causando problemas.
El meteorólogo Ángel Rivera, portavoz de la Aemet durante varias décadas y presidente de Acomet, indicó que 'lo que ha sido más anómalo, que no desconocido, ha sido la trayectoria de la segunda mitad del invierno y toda la primavera, marcado -pese a la ausencia de récords- por un tiempo nuboso, lluvioso y ventoso'.
Por esta razón, 'la gente tiene tantas ganas de sol y calor. Hoy, 41 de mayo -por ayer-, parece que quiere empezar el buen tiempo'.'El clima es variable', recalcó Viñas, que explicó que en Europa los fenómenos de El Niño o La Niña no tienen por qué traducirse en la existencia de épocas más o menos lluviosas. 'Sobre todo se trata de variabilidad atmosférica, que en Europa es muy alta. Cada año el tiempo se comporta de modo distinto, no relacionaría esto con fenómenos globales'. En cinco, diez o quince años, concluyó, 'se llegará a tener una idea más certera de cómo serán los próximos meses'.
La borrasca fría responsable de las lluvias persistentes caídas en el norte durante este fin de semana -sobre todo en Navarra y País Vasco- se aleja y hay una tendencia 'clara' de mejoría. Sin embargo, a finales de semana podría haber un empeoramiento, aunque nunca una vuelta al invierno.
Sobre lo sucedido en las últimas 48 horas en Navarra, donde las lluvias causaron desbordamiento de ríos y numerosos problemas viarios, Lomas indicó que la situación generada por un sistema frontal asociado a una borrasca, 'casi estacionaria', no estuvo prevista en toda su dimensión. 'Los modelos numéricos no fueron capaces de apreciarlo; este tipo de situaciones no las calculan bien y tienden a infravalorarlas'; incluso 'es normal que en ocasiones varíe el doble o triple' de lo esperado, añadió, descartando que sin embargo se pudiese hablar de falta de previsión.
ALGUNAS 'DESVIACIONES'
Al respecto, el portavoz de la Asociación de Comunicadores de Meteorología (Acomet), José Miguel Viñas, coincidió en que los modelos numéricos todavía no son tan finos y, en ocasiones, 'se producen este tipo de desviaciones'. En este caso, además, las consecuencias empeoraron porque el suelo ya estaba muy saturado y los caudales de los ríos estaban llenos lo que acabó causando problemas.
El meteorólogo Ángel Rivera, portavoz de la Aemet durante varias décadas y presidente de Acomet, indicó que 'lo que ha sido más anómalo, que no desconocido, ha sido la trayectoria de la segunda mitad del invierno y toda la primavera, marcado -pese a la ausencia de récords- por un tiempo nuboso, lluvioso y ventoso'.
Por esta razón, 'la gente tiene tantas ganas de sol y calor. Hoy, 41 de mayo -por ayer-, parece que quiere empezar el buen tiempo'.'El clima es variable', recalcó Viñas, que explicó que en Europa los fenómenos de El Niño o La Niña no tienen por qué traducirse en la existencia de épocas más o menos lluviosas. 'Sobre todo se trata de variabilidad atmosférica, que en Europa es muy alta. Cada año el tiempo se comporta de modo distinto, no relacionaría esto con fenómenos globales'. En cinco, diez o quince años, concluyó, 'se llegará a tener una idea más certera de cómo serán los próximos meses'.
