Samsung ha presentado nuevas demandas en tribunales de Japón y Australia en las que solicita la prohibición de la venta del iPhone 4S. La compañía continúa con sus acciones legales para intentar detener la venta del nuevo 'smartphone' de Apple.
Las nuevas demandas de Samsung se unen a iniciativas similares de la compañía en Francia e Italia, además de Holanda, donde el pasado viernes la justicia rechazó su petición.
La batalla legal entre Samsung y Apple se agudiza. Lejos de llegar a un acuerdo, ambas compañías están intensificando sus esfuerzos para impedir que productos de su rival lleguen al mercado. Por el momento, Apple ha sido la que más éxito ha tenido ya que ha conseguido paralizar la venta de 'tablets' de Samsung en Australia y en Alemania. Samsung está respondiendo a las decisiones judiciales contra sus productos con reclamaciones y nuevas demandas.
La última acción de Samsung ha llevado a la compañía a presentar denuncias contra Apple en Japón y Australia. La compañía surcoreana solicita a la justicia de ambos países la paralización de las ventas del iPhone 4S, el nuevo teléfono de Apple. Samsung ha alegado vulneración de patentes por parte de Apple que afectan a los sistemas de conexión móvil del dispositivo.
La decisión de Samsung de emprender nuevas medidas legales se ha producido después de que presentase reclamaciones legales contra el último iPhone en Francia e Italia. Estas reclamaciones se produjeron menos de un día después de que el dispositivo se diese a conocer.
Desde abril, Apple y Samsung han estado inmersos en una batalla legal enconada en 10 países, involucrando a los teléfonos inteligentes y 'tablets' de ambas compañías. Los dispositivos de ambas marcas se disputan el primer lugar en los mercados de rápido crecimiento.
Los últimos ataques de Samsung se han producido después de que la compañía haya sufrido varias derrotas en los tribunales. Primero, la justicia alemana paralizó las ventas de su 'tablet' Samsung Galaxy Tab 10.1. Después, en Australia, se tomaron medidas cautelares como las de Alemania. La última derrota de la compañía tuvo lugar el pasado viernes, cuando la justicia de Holanda desestimó su petición de paralizar las ventas del nuevo iPhone 4S.
La estrategia de Samsung está siendo devolver las demandas a Apple. La última medida ha tenido lugar este lunes 17 de octubre. La compañía surcoreana ha presentado peticiones en Japón y Australia. Además, precisamente en Australia, ha recurrido la decisión judicial que está paralizando la distribución de sus 'tablets' Galaxy Tab 10.1.
'Respetamos a Apple como uno de nuestros mayores clientes, pero no nos quedaremos de brazos cruzados, dejando que atenten contra nuestros intereses', aseguró la semana pasada el CEO de Samsung Electronics, Choi Gee-sung, según un portavoz de la compañía comentaba la semana pasada.
En medio de las batallas legales, el presidente y director de operaciones de Samsung Electronics, Lee Jae-yong, fue a Estados Unidos el domingo para asistir al funeral privado de Steve Jobs organizado por Apple, según ha confirmado un portavoz de Samsung Group.
Los medios locales han especulado con que Lee podría tener una reunión con el actual CEO de Apple, Tim Cook, para discutir formas de resolver la disputa legal, pero las compañías no han comentado esta posibilidad.
La batalla legal entre Samsung y Apple se agudiza. Lejos de llegar a un acuerdo, ambas compañías están intensificando sus esfuerzos para impedir que productos de su rival lleguen al mercado. Por el momento, Apple ha sido la que más éxito ha tenido ya que ha conseguido paralizar la venta de 'tablets' de Samsung en Australia y en Alemania. Samsung está respondiendo a las decisiones judiciales contra sus productos con reclamaciones y nuevas demandas.
La última acción de Samsung ha llevado a la compañía a presentar denuncias contra Apple en Japón y Australia. La compañía surcoreana solicita a la justicia de ambos países la paralización de las ventas del iPhone 4S, el nuevo teléfono de Apple. Samsung ha alegado vulneración de patentes por parte de Apple que afectan a los sistemas de conexión móvil del dispositivo.
La decisión de Samsung de emprender nuevas medidas legales se ha producido después de que presentase reclamaciones legales contra el último iPhone en Francia e Italia. Estas reclamaciones se produjeron menos de un día después de que el dispositivo se diese a conocer.
Desde abril, Apple y Samsung han estado inmersos en una batalla legal enconada en 10 países, involucrando a los teléfonos inteligentes y 'tablets' de ambas compañías. Los dispositivos de ambas marcas se disputan el primer lugar en los mercados de rápido crecimiento.
Los últimos ataques de Samsung se han producido después de que la compañía haya sufrido varias derrotas en los tribunales. Primero, la justicia alemana paralizó las ventas de su 'tablet' Samsung Galaxy Tab 10.1. Después, en Australia, se tomaron medidas cautelares como las de Alemania. La última derrota de la compañía tuvo lugar el pasado viernes, cuando la justicia de Holanda desestimó su petición de paralizar las ventas del nuevo iPhone 4S.
La estrategia de Samsung está siendo devolver las demandas a Apple. La última medida ha tenido lugar este lunes 17 de octubre. La compañía surcoreana ha presentado peticiones en Japón y Australia. Además, precisamente en Australia, ha recurrido la decisión judicial que está paralizando la distribución de sus 'tablets' Galaxy Tab 10.1.
'Respetamos a Apple como uno de nuestros mayores clientes, pero no nos quedaremos de brazos cruzados, dejando que atenten contra nuestros intereses', aseguró la semana pasada el CEO de Samsung Electronics, Choi Gee-sung, según un portavoz de la compañía comentaba la semana pasada.
En medio de las batallas legales, el presidente y director de operaciones de Samsung Electronics, Lee Jae-yong, fue a Estados Unidos el domingo para asistir al funeral privado de Steve Jobs organizado por Apple, según ha confirmado un portavoz de Samsung Group.
Los medios locales han especulado con que Lee podría tener una reunión con el actual CEO de Apple, Tim Cook, para discutir formas de resolver la disputa legal, pero las compañías no han comentado esta posibilidad.
