“A todos nos duele lo que está pasando. Queremos que se haga justicia en nombre de ella”. Estas palabras son de Gladys, una barquense de nacionalidad paraguaya y amiga de Alicia Romero, la hermana de Leticia Magali Sanabria, más conocida como Rosi, asesinada el viernes por asfixia en su domicilio de la avenida Conde de Fenosa, en O Barco de Valdeorras.
Gladys, que lleva dos años en España, explicó que la hermana de la fallecida “está muy mal y su familia también. Ella no puede hablar. Su consuelo es estar en contacto con su familia. Yo estoy con ella, la estoy ayudando. Apenas podemos dormir y, si podemos, un par de horitas”, comentó.
La muerte de Leticia Magali Sanabria sobrepasó las fronteras estatales y también cansó consternación en el país de donde era originaria la fallecida. El canal de televisión C9N Paraguay entrevistó a su hermano Marcelo, residente en el país suramericano. A preguntas de los locutores, éste explicó que la familia solo sabe que fue encontrada sin vida en la habitación con signos de violencia.
Marcelo Sanabria mencionó en el citado canal televisivo la última conversación que la familia tuvo con la fallecida, quien llegó a España, añadió, hace tres años para trabajar en el servicio doméstico: “En una llamada con mi madre le dijo que había conseguido una persona de confianza, con quien al otro día iba a realizar un depósito de dinero que ella no podía hacer”. No descarta que la causa de la muerte de su hermana tuviese un trasfondo económico.
Además, el hermano de “Rosi” explicó durante la entrevista que mantuvo contacto con el embajador de Paraguay en Madrid para la repatriación del cadáver. “Estamos buscando en todos lados cómo se puede hacer”, reconoció. Esta cuestión también fue tratada por el embajador con el alcalde de O Barco, Alfredo García Rodríguez, quien explicó que no podría realizarse “hasta que la jueza lo autorice”.
Sin detenidos
La muerte está siendo investigada como un homicidio por la Policía Judicial de la Guardia Civil de Ourense, con apoyo de los agentes barquenses. El subdelegado del Gobierno, Emilio González Afonso, mostró ayer su confianza en que la investigación dará frutos en breve plazo. “Guardia Civil y Policía Judicial son muy buenos profesionales y estos asuntos llevan su ritmo”, asegurando seguidamente no tener constancia de detenidos.
El suceso conmocionó a la comunidad formada por los vecinos de O Barco originarios de Paraguay. No son muchos, pues a fecha del pasado 26 de julio, el censo de población de O Barco recogía que de los 13.361 habitantes del Concello, 30 son originarios del país suramericano, siendo mujeres más de la mitad de las personas registradas (21).
Esta conmoción no solo afectó a los compatriotas de la mujer fallecida, también descolocó al resto de ciudadanos de O Barco. El Concello no fue ajeno a los hechos violentos del segundo piso del número 42 de la avenida de Conde de Fenosa, residencia de la víctima, sellada por la Guardia Civil después de investigar durante horas su interior en busca de pruebas. Una concentración en la que participó un centenar de personas y guardó un minuto de silencio en señal de repulsa por la muerte violenta de Leticia Magali. Fue este sábado, en la Praza do Concello.
Ayer, domingo, los portavoces de los distintos grupos municipales mantuvieron contactos encaminados a consensuar posibles medidas sobre la programación de las Festas do Cristo 2021 para los próximos días. Las consultas dieron como resultado la convocatoria de un pleno extraordinario urgente para esta misma mañana. En la sesión, la Corporación aprobará una declaración institucional sobre el homicidio.
