Casi cuatro mil personas visitaron, entre enero y octubre, el parque natural de Serra da Enciña da Lastra en Rubiá. Más concretamente, fueron 3.897 las contabilizadas por el centro de interpretación del parque más joven de Galicia, cuya declaración cumplió 20 años el pasado mes de febrero. La cifra no dista demasiado de los 4.218 registros en todo 2021.
Las cifras fueron facilitadas por la Conselleria de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, desde donde aclaran que los datos recogidos en las instalaciones de Biobra no se corresponden totalmente a la realidad pues son obtenidas contando a las personas que visitan el centro de interpretación, extrapolando este dato para ofrecer una estimación de los visitantes totales.
Estos cálculos tienen su razón en un parque natural como el de Rubiá. Son muchas las personas que lo visitan sin detenerse en el centro de interpretación, yendo directamente a cubrir alguna de sus rutas, como pueden atestiguar los trabajadores de la Xunta, quienes frecuentemente se encuentran con grupos cuya presencia ignoraban.
Localizado a apenas 12 kilómetros de la capitalidad municipal de Rubiá y a solo 16 de la villa de O Barco de Valdeorras, la mayor parte de los visitantes llega en grupos, bien para recorrer las rutas caminando o en BTT. Esta circunstancia fue apuntada por el alcalde, Elías Rodríguez, quien echa en falta una mayor implicación de los empresarios locales para ofrecer unos servicios que los visitantes no encuentran en la actualidad, como un restaurante donde detenerse a comer. “A iniciativa privada é fundamental. Debería haber máis”, comentó.
La opinión es totalmente contraria desde el colectivo empresarial. Al menos así lo estima Amadeo León, propietario de los cuatro apartamentos Las Médulas, un negocio abierto en el núcleo de Covas, en pleno parque natural. “Serra da Enciña da Lastra no es muy conocida. Cuando llegan, los visitantes se sorprenden del paisaje, pero para ellos era desconocido”, comentó. Esta circunstancia llevó a este empresario a apostar por el paraje leonés de Las Médulas, que la Unesco declaró Patrimonio de la Humanidad hace casi un cuarto de siglo y al que en los últimos días dotó con el título de “Valor Universal Excepcional”. A apenas 16 kilómetros, la mayoría de sus clientes llega buscando las explotaciones auríferas romanas.
En todo caso, Serra da Enciña da Lastra también posee argumentos más que interesantes para ser visitada, aunque alguno de ellos sea desconocido, como el bosque de castaños bravos próximo a Covas, de gran interés botánico.
