Su peligrosidad preocupa al Concello y a la Asociación de Amigos
Los 600 metros más peligrosos del trazado del Camiño de Inverno están en A Rúa. El itinerario que siguen los peregrinos recorre la vieja N-536 en un tramo carente de andenes y encajado entre un talud y el barranco bajo el cual discurre la línea de ferrocarril Palencia-A Coruña. "Levamos tempo advertindo a perigosidade dese tramo. Esos 600 metros son os máis perigosos. Non podemos meter peregrinos, e menos grupos, nese embudo", comentó Asunción Arias Arias, presidenta de la Asociación de Amigos do Camiño de Inverno.
El colectivo lleva muchos meses reclamando una solución e incluso está elaborando un dossier para presentarlo al Xacobeo 2021. Paralelamente, y como medida provisional, plantean colocar señales advirtiendo a los conductores del paso de peregrinos.
Esta misma propuesta fue remitida desde el Concello de A Rúa a la delegación provincial de la Consellería de Infraestruturas e Mobilidade, organismo que posee la titularidad de la carretara. "Sería colocar unha sinal que indicase a posibilidade de encontrarse con peregrinos", dijo el alcalde en funciones, Luis Fernández Gudiña.
El citado escrito no es la única iniciativa que desarrolló el Concello rues. Hace algunos meses, presentó una memoria, valorada en aproximadamente 400.000 euros, planteando una posible solución al problema. El regidor rues estuvo acompañado por los de O Barco y Vilamartín, pues el tramo forma parte de una ruta circular de 80 kilómetros que rodea Valdeorras y que buscan desarrollar. "O único tramo sin facer é este", dijo Luis Fernández. Incluso planteó a técnicos de ADIF si la construcción de voladizos, que es la solución encontrada, plantearía problemas a la línea de ferrocarril, recibiendo una respuesta negativa.
En Vilamartín, su homólogo, Enrique Álvarez Barreiro, solicitó ayuda del programa de financiación Agader para consolidar el tramo que linda con el rues. Construido por el Concello al ser de titularidad municipal.
