Los vecinos de Prada (A Veiga) se sumaron ayer a las críticas de O Castro y Éntoma (ambos de O Barco) contra la tasa por depuración de aguas residuales que comenzó a recaudar la Diputación. Este organismo forma parte del Consorcio de Aguas de Valdeorras, en el que también participan Augas de Galicia y los nueve concellos de la comarca. Yolanda Rodríguez Carracedo, asesora legal de la Asociación Cultural de Prada, explicó que este colectivo y el alcalde pedáneo presentaron sendos recursos de reposición ante la Diputación.
Este pueblo de 25 habitantes esgrime dos argumentos. "El cálculo estimativo es altísimo y desmesurado, teniendo en cuenta que se trata de núcleos rurales envejecidos", con consumos inferiores a los de las ciudades. Por ello, pide la aplicación del primer tramo, de 1,50 euros por trimestre y no los 11,70 euros que le reclaman. La portavoz también dijo que el alcantarillado lo construyeron los vecinos, por lo que “no existe objeto impositivo".
