Vinculado a la Villa termal desde que era pequeño y amigo personal del alcalde Lorenzo, asegura sentirse honradísimo y espera estar a la altura. Comprometido desde el principio con el proyecto del Balneario de Mondariz, Sancho Gracia estudia echar a andar un Festival de Teatro como referente cultural del Condado.
El veterano actor Sancho Gracia recibirá esta tarde, de manos del presidente de la Diputación, el premio provincial a las Bellas Artes y Cultura. El alcalde del pequeño municipio de Mondariz, su amigo de la infancia, asegura que por parte de Louzán es un gesto de justicia pues desde el principio se identificó con el proyecto termal y fue de los primeros pilares para lograr el objetivo principal, hacer del Balneario de Mondariz un referente, considerado como el mejor que hay en toda España.
El galardón, del que se siente honradísimo y orgulloso viene a reconocer su largo compromiso con la provincia y sobre todo, con el municipio de sus escapadas para el descanso. Todo el mundo me hacía en las Seychelles y yo estaba en el Balneario, que por cierto, recuerda que era una ruina, pero para él y el alcalde siempre fue un reto de futuro donde uno tenía las ideas y el otro las apoyaba en lo que podía.
Tandem familiar
Actor y alcalde forman un curioso tandem que les viene de familia, cuando sus respectivos padres coincidieron trabajando en el Gran Hotel. Eran y son una piña en su apuesta. Ahora, con el paso de los años y, aunque queda poco que hacer, están empeñados en concretar el complemento al termalismo de primera categoría poniendo los pila res para crear un gran proyecto cultural de calidad acorde con las dimensiones del municipio, que incluiría, entre otras actividades, un Festival de Teatro Ambos, estudian posibilidades y apoyos económicos para lograrlo cuanto antes.
Sancho Gracia descansa estos días a caballo entre su casa de Pías y la instalación balnearia que ha dado a conocer por todo el mundo y es que, como él mismo dice, el señor de la botella estaba presente en todas partes. Fue el maestro de ceremonias de la conferencia que dio José Antonio Lorenzo en la Casa de Galicia en Madrid y consiguió en los años de la dictadura que un ministro cubano visitara España y, sobre todo, que visitara el Balneario. Recuerda también su encuentro con Paquito Fernández Ochoa con quien lo pasó fenomenal poco antes de su muerte.
Esta tarde en el Pazo de la Diputación, aunque lo intente disimular, se emocionará bastante, igual que el alcalde, que le acompañará junto a sus hijos, porque quieren mucho a Félix. Por la alfombra roja del hoy juzgado como mejor balneario de toda España y Villa Termal Modelo, pasó, gracias al embajador de excepción, lo más granado del cine, pero, eso sí de incógnito. Un silencio cómplice que es muy positivo, porque tras descubrirlo, volvieron.
El galardón, del que se siente honradísimo y orgulloso viene a reconocer su largo compromiso con la provincia y sobre todo, con el municipio de sus escapadas para el descanso. Todo el mundo me hacía en las Seychelles y yo estaba en el Balneario, que por cierto, recuerda que era una ruina, pero para él y el alcalde siempre fue un reto de futuro donde uno tenía las ideas y el otro las apoyaba en lo que podía.
Tandem familiar
Actor y alcalde forman un curioso tandem que les viene de familia, cuando sus respectivos padres coincidieron trabajando en el Gran Hotel. Eran y son una piña en su apuesta. Ahora, con el paso de los años y, aunque queda poco que hacer, están empeñados en concretar el complemento al termalismo de primera categoría poniendo los pila res para crear un gran proyecto cultural de calidad acorde con las dimensiones del municipio, que incluiría, entre otras actividades, un Festival de Teatro Ambos, estudian posibilidades y apoyos económicos para lograrlo cuanto antes.
Sancho Gracia descansa estos días a caballo entre su casa de Pías y la instalación balnearia que ha dado a conocer por todo el mundo y es que, como él mismo dice, el señor de la botella estaba presente en todas partes. Fue el maestro de ceremonias de la conferencia que dio José Antonio Lorenzo en la Casa de Galicia en Madrid y consiguió en los años de la dictadura que un ministro cubano visitara España y, sobre todo, que visitara el Balneario. Recuerda también su encuentro con Paquito Fernández Ochoa con quien lo pasó fenomenal poco antes de su muerte.
Esta tarde en el Pazo de la Diputación, aunque lo intente disimular, se emocionará bastante, igual que el alcalde, que le acompañará junto a sus hijos, porque quieren mucho a Félix. Por la alfombra roja del hoy juzgado como mejor balneario de toda España y Villa Termal Modelo, pasó, gracias al embajador de excepción, lo más granado del cine, pero, eso sí de incógnito. Un silencio cómplice que es muy positivo, porque tras descubrirlo, volvieron.
