El técnico Gonzalo García de Vitoria retrasa la firma de la renovación por las dudas que le genera la viabilidad económica del proyecto ourensano
Pasan los días pero el COB sigue sin poder o saber dar forma al proyecto deportivo para una temporada que ya ha dejado de ser próxima para ser presente. Con la inscripción y la presencia en la LEB Oro garantizada, el COB es ahora mismo un espectador del mercado en una categoría con todas las plantillas tomando forma excepto la ourensana y curiosamente la de un Breogán en situación similar.
En el club lucense entrarán a finales de semana dos directivos que harán los primeros movimientos en el club a la espera de la Asamblea de finales de mes en la que se conocerá el nuevo Consejo de Administración. En el COB la salida oficiosa del presidente Antonio Gavilanes ha dejado paso a un Consejo incompleto y que no puede avanzar en su proyecto debido a las limitaciones presupuestarias.
Ante ese panorama, y como ya había avanzado Antonio Gavilanes antes de su dimisión, el Consejo ha elaborado un presupuesto de mínimos con el que diseña el proyecto a la espera de inyecciones económicas que aporten nuevas incorporaciones a la directiva o que lleguen en forma de patrocinadores.
El acuerdo entre el COB y el entrenador Gonzalo García de Vitoria es total pero el técnico no estampará su firma hasta reunirse con el Consejo y decidir si es viable la configuración de la plantilla con el presupuesto que maneja el club.
"Me he puesto a trabajar y estoy hablando con jugadores y con agentes para elaborar un equipo real con el precio de mercado que hay y saber si estamos lejos o muy lejos de lo que tenemos", dice Gonzalo García de Vitoria.
Es el siguiente paso tras la reunión este mismo fin de semana con el gerente Cesar Fernández: "En el contrato ya no hay dudas pero entiendo las que Gonzalo tiene sobre el equipo que podamos hacer. Reconozco que el presupuesto que tenemos es muy bajo".
"Somos conscientes de que el objetivo será modesto y probablemente la permanencia pero al menos hay que hacer un equipo para no hacer el ridículo", añade el entrenador.
A lo largo de la semana está prevista una nueva reunión con el entrenador y a la que podrían unirse algunos de los miembros del Consejo de Administración. En el club ha quedado clara la unanimidad por la continuidad de Gonzalo García de Vitoria pero son conscientes de que su renovación no está garantizada. Es más, en caso de retrasarme podría añadirse un nuevo hándicap, que algún club de la LEB Oro realizase una oferta al hasta la temporada pasada entrenador del COB.
Si el Consejo de Administración no es capaz de reforzarse o de generar ingresos privados parece complicada no solo la renovación de Gonzalo García de Vitoria si no llevar adelante un proyecto medianamente digno para la categoría en la que militará. Un problema reconocido internamente pero al que no se atisban soluciones.
