Un pleno muy dividido y con sabor a mítin político en Laza

Nueve puntos del día y una hora y media. Tiempo suficiente para que los ataques entre los miembros de la corporación del Concello de Laza fueran constantes. Se percibía en el ambiente que el 28 de mayo cada vez está más cerca. José Ramón Barreal, alcalde de Laza, anunció la prórroga de los presupuestos de 2019, “con algunha modificación para cadrar” dijo, para este año: 1,3 millones de euros de ingresos y 1,2 millones de euros de gastos. También dio cuenta de la liquidación del presupuesto de 2022, con 1,8 millones de euros ingresados y 1,7 de gastos.

Entre cifras comenzó la primera de las polémicas. Se llevó a pleno un reconocimiento extrajudicial de créditos “para poder facer unhas modificacións de créditos e pagar as facturas pendentes, para as que temos diñeiro”, defendió el regidor frente a la insistencia de Jorge Lorenzo, portavoz de Xuntos por Laza, por conocer las facturas pendientes, las que tildo de “deudas”. Un punto que, junto a la modificación presupuestaria, se aprobó con cinco votos a favor: cuatro de los populares y uno de Ricardo Sobrino, edil no adscrito al desvincularse del PSOE recientemente.

Y es que en la mesa plenaria había cuatro concejales del PP -contando al alcalde y que gobiernan en minoría-, Jesús Blanco del PSOE, Sobrino y dos ediles de Xuntos. Una división que se notó durante todo el pleno, el que continuó con la dación de varios convenios, como el arreglo del entorno de la Iglesia de San Xoán con la Consellería de Medio Ambiente o la ratificación en pleno del convenio con la Consellería de Industria para el parque eólico de Rebordechao.

Y entre otros puntos llegó el turno de ruegos y preguntas, donde los mítines políticos estuvieron servidos. Más allá de una serie de cuestiones al alcalde sobre su gestión, Blanco hizo un balance de esta legislatura recordando el fracaso del bipartito de los socialistas con Xuntos y sacando los “trapos sucios” de Barreal. Un momento en el que los reproches no faltaron.