Algunos quieren retroceder a la época castrexa

Desde el verano hemos conocido la particular guerra de ciudadanos de diferentes partes de España contra el turismo. Como si de un virus se tratase ese "pensamiento único" que comparte estas personas se va extendiendo y parece que ya afectó a Ourense. En el marco de esta ola de acciones, que se suceden desde hace algunos meses, su huella quisieron dejar en Ourense con esa pintada junto la oficina de turismo del Puente Romano. El pretexto de los ataques son los supuestos efectos adversos que tiene el elevado número de visitantes y la presunta sobreexplotación de los atractivos turísticos de nuestras ciudades y pueblos. Resulta evidente que esta industria puede generar trabajo, así como múltiples riquezas y beneficios a Ourense. Muchas son las familias que viven del turismo y en las que nadie piensa.

Quienes protagonizan estos actos vandálicos, parecen querer hacernos retroceder a la época castrexa. ¿Serían ellos capaces de prescindir del móvil y del whatsapp?