En Cudeiro ya escasea la oferta

En el Café-Bar A Terraza (Cudeiro), Alba Campo explica tras la barra que "se busca mucha casa por las afueras, tanto aquí como en otras zonas similares de Ourense, y ya quedan muy pocas disponibles. Todo voló en 2020. Otras personas -también muchas- lo que hicieron fue restaurar la antigua vivienda de sus padres y venirse a vivir aquí", explica la hostelera.

"También llega mucha gente preguntando por alquileres", añade, pero ya es demasiado tarde. "Entras en páginas web de venta de vivienda y ya no queda ni una. A Cudeiro la gente empezó a venir hace dos años, porque esta es una zona tranquila y bien conectada, a donde llega el autobús urbano", explica. "Por aquí se vendieron dos o tres casas el año pasado", añaden unos vecinos mientras degustan un vino para celebrar el festivo.

En otro de los bares de la parroquia, Luis Meléndez toma un café. Nacido en Cudeiro, lleva seis años residiendo en el lugar. Encontrar una casa a la venta por la zona ya resulta complicado. En caso de que alguien contara con esa suerte, Meléndez tiene claro su consejo: "Si compras aquí -o en tantas otras de las zonas rurales del Concello- una casa pequeña, te sale mejor de precio que un piso en A Ponte o en O Vinteún. Y una vivienda unifamiliar grande, con piscina, puede seguir valiendo menos que un piso en el centro de Ourense. Yo, desde luego, prefiero gastar 200.000 euros en una casa que en un piso" explica el vecino.

"Fanático" de las viviendas unifamiliares, reconoce que "si me tocase un Euromillón, compraría una en cada zona de playa". Loterías aparte, en la actualidad vive en una casa sin terreno. "Aún así, la prefiero a un piso, y siempre puedes ampliarla".

No obstante, la llegada de vecinos no se ha producido de forma similar en todas las zonas rurales y semirrurales del entorno de la ciudad. Así, desde una de las cafeterías de Velle, el Marta Pato Café-Bar, su dueña destaca que lleva muchos años encontrándose a los mismos vecinos en su local. Y no son pocas las viviendas de la zona que amanecen cada día con un cartel de "Se vende" en su fachada.