Cinco rutas de senderismo para conocer la riqueza infinita de O Invernadeiro

Otra oportunidad para admirar y contempla la naturaleza en todo su esplendor es este Parque Natural. Situado en el Macizo Central ourensano, y conformado por los valles de los ríos Ribeira Grande y Ribeira Pequena, afluentes del Camba y pertenecientes a la cuenca del Sil.

Una zona montañosa encuadrada por las sierras de Queixa y Fial das Corzas, con picos de más de 1.600 metros, repartidos por 5,722 hectáreas, por lo que ofrece muchas rutas para recorrer, así como diferentes perspectivas que contemplar.

Su fauna es uno de los mayores atractivos que presenta como Parque Natural. En él habitan mamíferos como corzos, ciervos, o cabras montesas, preciadas especies de la comunidad a las que se podrá contemplar pudiendo saciar la curiosidad sin perturbar su hábitat natural.

Conectar con la naturaleza

Porque el propio hábitat en sí mismo supone un incentivo para acercarse hasta O Invernadoiro, que no queda tan lejos de la ciudad pero que proporciona un silencio y una conexión con la naturaleza que puede transportar a sus visitantes a un mundo paralelo, ya que este es el único Parque Natural de Galicia en el que no hay poblaciones humanas. Además posee hasta 15 especies catalogadas de de reptiles y 10 de anfibios, como la víbora hocicuda, presente en muy pocos puntos de la provincia de Ourense.

Por lo que se puede ir a meditar o realizar actividades similares, pero también se pueden disfrutar de sus numerosas rutas, recorrer las sendas del Agua o las Truchas para contemplar la belleza del entorno que nos regala el río Ribeira Grande.

Un entorno atemporal, ya que nunca es igual todo el año. Según la estación en la que nos encontremos, el paisaje se viste distinto. Así, se podrá disfrutar de unas vistas de suaves cumbres verdes, como las frías pero imponentes montañas cubiertas de nieve, a la delicadeza malva de los brezales en primavera.

Existen varias rutas disponibles que varían dependiendo del tiempo que desee emplearse en hacerlas, así como los grados de dificultad que presentan.

Las rutas de modalidad “baja” son “La ruta del Agua”, una ruta circular de 4 kilómetros y de dos horas de duración lleva hasta el embalse de As Portas, el segundo más grande de Galicia, y la “ruta de las Truchas” que también es circular y lleva un tiempo de dos horas para recorrer sus 3,5 kilómetros que comunica ambas orillas del río Ribeira Grande. En esta ruta se encuentra el Centro Ictiogénico (laboratorio de truchas).

En la consideración de modalidad “media” se encuentra la “ruta de A Aceveda”, que consiste en realizar un recorrido circular de 8 kilómetros, lo que nos llevaría unas tres horas y media de duración con una buena vista del valle del río Ribeira Pequena y la Caseta do Birlauto.

Luego disponen de una ruta en la categoría media/alta, que son dos: la “ruta de Valdereixa o de los Cercados”, un ascenso de tres kilómetros que dura aproximadamente dos horas, en la que pasados unos 100 metros, aparece el cercado de los ciervos.

Y para los más aventureros disponen de dos recorridos de alta dificultad. Existe la posibilidad de realizar la “ruta de A Corga o de O Depósito” un recorrido de dos kilómetros por una pista ascendente con un tiempo estimado de hora y media.

Por último, la “ruta de A Ortiga” supone la más larga, con 22 kilómetros de paseo que permitirán conocer la entereza del Parque Natural de O invernadoiro. La duración es de siete horas aproximadamente para recorrer este camino que asciende por la zona sureste del espacio protegido, desde una cota de 930 metros en el Aula de la Naturaleza hasta los 1.488 metros en el Pico da Ortiga, situado a 11 kilómetros del inicio.

Sea cual sea la ruta o dificultad a escoger siempre será un acierto poder pasar la jornada en este parque, que representa la riqueza natural de la provincia de Ourense tanto en flora, fauna como por sus abrumadores paisajes.