Sánchez Vidal deja en manos del BNG su continuidad como teniente de alcalde de Ourense

Con el argumento de que no quiere ser un obstáculo para el Bloque Nacionalista Galego, el todavía teniente de alcalde de Ourense, Alexandre Sánchez Vidal, ha puesto este cargo y, consecuentemente, el de responsable municipal del BNG, a disposición del partido. Lo hizo el pasado jueves, víspera del Primero de Mayo, en una reunión del consello local donde se debatió la situación actual del grupo y, en especial, la renuncia de la concejala Marta Arribas a sus responsabilidades en termalismo, después de ser excluida de un viaje encabezado por el propio Sánchez Vidal, para visitar diversos balnearios de Europa.

En aquel encuentro, el teniente de alcalde zanjó el debate abierto poniendo su cargo a disposición, acto que ahora dependerá de los resultados de la asamblea nacional que se celebra este fin de semana y de una asamblea local, convocada en la ciudad para el próximo día 16.

Un nuevo consello local, el pasado lunes, abundaba en la situación que se ha generado en el partido con esta decisión de Sánchez Vidal, que volvió a reiterar su puesta a disposición del partido, voluntad que será dilucidada en esa futura asamblea local, que tendrá carácter soberano a la hora de decidir el futuro del teniente de alcalde y de la elección, si finalmente se produce su marcha, de su sucesor en la tenencia de alcaldía y en el liderazgo local del BNG.

Aunque el propio Sánchez Vidal ha declinado efectuar declaraciones, lo mismo que otros miembros afines del BNG, fuentes cercanas al teniente de alcalde señalan que un cambio de caras, con el horizonte de las próximas municipales, puede ser enriquecedor para su formación política y para la revitalización del BNG local; argumentos todos ellos esgrimidos por Sánchez ante su entorno.

No será candidato

Independientemente de que el partido acepte o no su marcha, Sánchez Vidal habría comunicado a sus compañeros más cercanos su voluntad de no presentarse nuevamente a las elecciones municipales, al considerar que su vida profesional y política cumplió ya un ciclo, iniciado hace 16 años, además de exponer razones personales y familiares para su alejamiento de la política activa.

De cualquier modo, su posible marcha del Concello, o en todo caso su renuncia a las tareas propias de la tenencia de alcaldía, abre un nuevo debate, el de la sucesión al frente del grupo y en la tenencia, además del que se producirá de cara a las elecciones municipales, que se celebrarán dentro de dos años.

Nada ha trascendido, por el momento, sobre la primera de estas cuestiones, ni si pudiese haber candidatos preparados ya para suceder a Sánchez Vidal, aunque la división del grupo municipal en dos sectores enfrentados desde hace meses, hace prever un fuerte debate interno en lo que respecta a esta cuestión. Y ello tendrá repercusión en la candidatura electoral, porque si Sánchez Vidal se va, como parece, el que le suceda podría convertirse en el cabeza de lista en los próximos comicios.

Concello

La posible marcha de Alexandre Sánchez Vidal de la Tenencia de Alcaldía se produce, precisamente, cuando está a punto de cumplirse el ecuador del mandato del gobierno bipartito en la ciudad de Ourense, gestión que PSOE y BNG -con alcalde socialista- estrenaron el 16 junio de 2007.

Cierto sector del partido da por definitiva su renuncia a la responsabilidad de la Tenencia pero no está claro aún -depen diendo de la dirección nacional que salga de la asamblea de este domingo y lo que decidan los militantes el sábado, 16- si abandonará por completo el Concello o permanecerá en la Corporación municipal como concejal del grupo nacionalista, ocupado en algunas de las responsabilidades que ahora ya ejerce, como el termalismo, el casco histórico o vivienda.

Claro que ‘a organización aínda non falou e eso pode ser determinante para o seu futuro e a súa marcha’, declara un militante cercano al aún teniente de alcalde.

Sánchez Vidal, que lleva 16 años en la política municipal, asegura a sus allegados que son demasiados años en esta actividad, en perjuicio de una carrera profesional (la de funcionario de la Administración autonómica) que ha tenido por completo abandonada en este tiempo.