Mucha lluvia, pero no de goles para el Pabellón y la UD Ourense (0-0)

Una vez más, Ourense ha vuelto a demostrar que quiere fútbol. Más de 400 espectadores desafiaron la intensa lluvia y el viento para dejar pequeña la grada del Miguel Ángel-Os Remedios para presenciar el derbi juvenil entre el Pabellón y la UD Ourense que finalizó con empate sin goles. El partido, como suele ser habitual en este tipo de enfrentamientos, fue muy intenso y disputado, pero sin las tanganas y las polémicas de antaño, algo que también es bueno destacar.

El inicio del encuentro fue un poco lo esperado, un conjunto unionista queriendo ser protagonista ante un Pabellón muy fiable atrás con tres centrales e intentando que no se le notaran las numerosas bajas. Los primeros 15 minutos fueron un monólogo visitante, aunque sin profundidad en los metros finales. El centrocampista rojillo Roi Currás, uno de los jugadores más destacados del choque, dominó el centro del campo y buscó en varias ocasiones el pase largo a la banda izquierda de Christian, pero los zagueros pabellonistas se mostraron muy seguros. Poco después, el técnico local Iván Alonso decidió retrasar al capitán Soriano, que empezó como falso 9, al centro del campo y dejar como único punta a Etien, con lo que el Pabellón tuvo superioridad en la zona de creación y empezó a equilibrar el choque.

La primera ocasión de peligro fue una falta lateral botada por Cougil que fue rematada por Lamús, en el segundo palo, por encima del travesaño. Con el paso de los minutos, los pabellonistas se sentían mejor sobre el verde y finalizaron el primer tiempo con un libre directo de Cougil, que blocó sin problemas el portero Álvaro.

Tras el paso por la caseta, los de Jorge de Dios metieron una marcha más y en el minuto 48, Roi Currás, probó fortuna con un disparo desde la frontal que se fue desviado. Un error en la salida de balón del meta visitante dejó el esférico muerto a Etien, quien conectó un centro desde la izquierda que remató desviado Cougil, con la cabeza, cuando estaba libre de marca.

Los unionistas respondieron con un centro-chut de Pablo Varela que atrapó en dos tiempos el meta Abraham. A la hora de juego, sería Joel quien lo intentó desde lejos y casi sorprendió a Álvaro.

En la siguiente jugada, el central local Lamús realizó una carga, dentro del área, a Pablo Varela, y el colegiado no consideró suficiente el contacto para señalar penalti.

Parecía que el derbi se abría y los cambios ayudaron a ello, ya que la frescura en los últimos metros hizo que se produjera alguna situación de peligro. En el minuto 76 fue el Pabellón quien pudo abrir el marcador tras un centro desde la izquierda del recién entrado Lucas a Etien, quien remató desviado en una posición muy favorable.

Roi Currás, al larguero

La ocasión más clara de todo el encuentro se produjo a falta de cuatro minutos para el pitido final. Un centro de Roberto lo estrelló en el travesaño, Roi Currás, con un potente cabezazo en el segundo palo.

A partir de ese momento, ambos equipos firmaron el armisticio y aunque la UD Ourense llegó mejor al tramo final, los dos equipos dieron por bueno un empate que deja al Pabellón en zona de ascenso a División de Honor y a los rojillos a dos puntos de dicho lugar.