El Ontime, con el trabajo a medias al parón

La Primera División femenina llega a su primer gran parón del curso. Aunque sea por una buena causa, el estreno del Campeonato del Mundo, el paréntesis será nada menos que de cinco semanas. El Ontime llega al parón con el trabajo a medias. Lo hace con mejores sensaciones que resultados y es que a pesar de moverse fuera del descenso, todavía está lejos de una situación cómoda, pues solo tiene un punto de ventaja sobre el tercero por la cola.

Tres derrotas de inicio, incluyendo un gran lunar, el de Penya Esplugues, donde dejó escapar una ventaja de dos goles en la segunda parte para terminar perdiendo. A añadir en el debe, su nulo bagaje a domicilio y el poco bagaje anotador. En el haber, su fortaleza como local, donde ha sumado los nueve puntos que lleva. Como resumen, mejores sensaciones que resultados y mucho margen de mejora, con el equipo tratando de ajustar unos pocos detalles que le permitirían dar un salto notable.

En plena semana de descanso, la única en este paréntesis, Carlos Navarro se encuentra disfrutando de “un solazo” y 23 grados de temperatura en plena mañana en su casa, en tierras levantinas. “Ya que tenemos ocasión, hay que venir a visitar a la familia, porque el lunes volvemos al trabajo. No podemos tener más descanso, porque después nos obligaría a tener una pretemporada casi desde cero”.

El técnico del Ontime reconoce que “no estamos donde queremos, pero tampoco tan lejos de lo que inicialmente podíamos pensar. Me faltan los tres puntos del patinazo de Esplugues, con los que estaríamos en mitad de tabla en una situación mucho más cómoda respecto al descenso. En cuanto a lo positivo, creo que somos un equipo más sólido y contundente en defensa. Al Futsi logramos hacerle daño con los robos en primera línea, pero echamos de falta alguien con más gol. Ahí se nos fue el partido. Mirando al futuro, si conseguimos mantener esa concentración con rivales de nuestra liga, sacaremos muchos partidos. La liga está muy chula, con muy poca diferencia entre los equipos de arriba y los de abajo, pudiendo ganar o perder con cualquiera. Mirando a mi equipo, creo que nos falta muy poco para estar a un gran nivel. Me quedo con la evolución, somos más consistentes y estamos más asentadas”.

El equipo apura estas mini vacaciones. Después, amistosos ante Poio y Burela y un tercero con rival por definir. Todo para llegar a mediados de diciembre en forma.