PRIMERA DIVISIÓN
El Madrid respira sin fútbol (2-0)
La victoria en Vigo sirve a la selección de hockey sobre patines para reivindicarse como la mejor entre todos los deportes
Vigo 2009 ha servido para que el hockey sobre patines se reivindique. La conclusión a la que han llegado todos los protagonistas de la cita es que este deporte no tiene todo el reconocimiento que se merecen sus logros y así lo proclaman a los cuatro vientos tras concretar la consecución del tercer título mundial consecutivo. La voz la levanta, en primer lugar, el propio presidente de la Federación Española, Carmelo Paniagua, que no se para en templar gaitas: Esta selección ha hecho historia en el deporte español y no está reconocida. No puedo exigir que se le reconozca, pero sí quejarme. Incluso se aventura a realizar comparaciones con galardones que se entregan a equipos o deportistas de otras disciplinas. Le dan premios mediáticos a deportistas famosos, que sin duda se lo merecen. Pero lo que ha hecho esta selección es inigualable. Si lo llega a hacer la de fútbol sala, baloncesto o balonmano, se tendría más en cuenta y el mérito es el mismo. Los Príncipe de Asturias o los Premios Nacionales nunca miran hacia un grupo que está dejando el nombre de España en lo más alto allá donde va, se lamenta Paniagua. En el entorno hay cierto disgusto con el Consejo Superior de Deportes. El secretario de estado, Jaime Lissavetzki, estuvo presente en la ceremonia de inauguración del Mundial y en la noche del sábado telefoneó a Paniagua para felicitarle por el título. El hockey sobre patines espera algún gesto más de cariño.
Piden una prima
También lo esperan, en otro orden de cosas, los jugadores. En la cena tras la final, celebrada en el propio Ifevi, no se cortaron en pedir a gritos una prima a la Federación. Como no estaba fijada, se lanzaron al monte: Dónde está ese coche, ese coche dónde está, corearon siguiendo a su capitán, Pedro Gil. Méritos han contraído, reconoce Paniagua. El balance del Mundial es muy positivo en todos los aspectos. En el deportivo, no hace falta ni decirlo: misión cumplida. Y el objetivo era complicado porque ganar títulos en casa no es fácil. Ha sido importante romper ese tabú, señala al referirse a que no se ganaba un campeonato del mundo en España desde 1972. Llevamos tres títulos seguidos y eso no lo ha logrado ninguna otra selección. Es un hito en el deporte español, reitera.
Contenido patrocinado
También te puede interesar
Lo último