Feijóo carga contra Sánchez en el Congreso: "Si trabajas, pagas; si robas, cobras; y si le aplaudes, prosperas"

El tono entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, volvió a elevarse este miércoles durante la sesión de control en el Congreso de los Diputados. A medida que la legislatura avanza hacia momentos decisivos, los cara a cara entre ambos dirigentes se han convertido en auténticos duelos verbales en los que se cruzan acusaciones de corrupción, manipulación y falta de ética.

Feijóo cargó con dureza contra el Ejecutivo, acusando al presidente de “exprimir a los trabajadores” mientras “premia al indecente”. “En España tiene que merecer la pena trabajar, y con usted merece la pena ser un jeta”, sentenció el líder del PP, quien reprochó a Sánchez las subidas de impuestos a los autónomos y las familias, a las que según dijo “solo les queda hacer cuentas mientras ustedes hacen caja”.

El popular fue más allá al asegurar que “la decencia no cotiza, el mérito no sirve y se castiga al honrado mientras se aplaude al indecente”. En su intervención, también vinculó al presidente con los casos que salpican al PSOE, citando a Ábalos, Santos Cerdán y Koldo García, y ironizó: “Mientras en su círculo corren los billetes como en un prostíbulo, las familias no llegan a fin de mes”.

Sánchez defiende la “decencia” de su Gobierno y acusa a Feijóo de guardar silencio ante Ayuso y Moreno

Por su parte, Pedro Sánchez replicó con contundencia y trató de desmarcarse del tono bronco de su rival. “Este es uno de los gobiernos más decentes, estables y eficaces de Europa”, aseguró el presidente, que defendió su gestión económica recordando que el Fondo Monetario Internacional ha elevado la previsión de crecimiento de España al 2,9 % en 2026, y que las agencias de calificación mejoraron la nota de la deuda pública. “Lo demás son bulos, mentiras e insidias”, zanjó.

Sánchez optó de nuevo por ignorar los ataques directos de Feijóo y centró su réplica en los dirigentes autonómicos del PP. Acusó al líder popular de “callar ante los excesos” de figuras como Isabel Díaz Ayuso o Juan Manuel Moreno, recordando declaraciones polémicas de ambos. “Lo que no es decente son sus silencios”, reprochó.

El presidente cerró su intervención cuestionando el papel político del líder del PP: “¿Qué aporta usted a la política española? En su grupo le aplauden para tapar con sus aplausos la nada de sus intervenciones”.

En un clima de creciente crispación, el debate sirvió para escenificar dos estrategias claras: la de Feijóo, centrada en presentar a Sánchez como símbolo de la corrupción y el castigo al esfuerzo; y la del presidente, decidida a proyectar una imagen de estabilidad, crecimiento y decencia institucional frente a la oposición que, según él, solo ofrece “ruido y descalificaciones”.

La sesión concluyó sin concesiones mutuas, consolidando una tensión que augura un final de legislatura marcado por la confrontación total.