Adiós a una leyenda de la moda

El diseñador italiano Giorgio Armani falleció ayer 4 de septiembre a los 91 años “rodeado de sus seres queridos”, según anunció la compañía en un comunicado. El Grupo Armani expresó su sentimiento de pérdida por quien fundó y nutrió esta familia con visión, pasión y dedicación: “Sentimos el vacío dejado por quien fundó y nutrió esta familia, pero es precisamente en su espíritu que nosotros, los empleados y los familiares que siempre hemos trabajado junto al Sr. Armani, nos comprometemos a proteger lo que él construyó y a llevar adelante su empresa en su memoria, con respeto, responsabilidad y amor”.

El Señor Armani, o “Il Signor Armani” como lo llamaban en su entorno, falleció tras algunos problemas de salud que lo llevaron a ausentarse por primera vez de sus desfiles en Milán y París, que debió dirigir de manera remota. Incansable hasta el final, se mantuvo activo en la empresa, en las colecciones y en los proyectos que estaba desarrollando, mostrando un compromiso absoluto con su visión y legado.

Su muerte llega pocas semanas antes de que la firma celebrara los 50 años de su fundación, conmemorando medio siglo de historia de la marca en la Semana de la Moda de Milán. Desde su nacimiento en Milán, el 24 de julio de 1975, Giorgio Armani supo forjar una visión que se extendió de la moda a todos los aspectos de la vida, anticipándose a los tiempos con claridad y pragmatismo.

Referente de elegancia

A lo largo de su trayectoria, Armani se consolidó como un referente de elegancia. Fue el diseñador que encumbró el traje tanto para mujeres como para hombres, diversificó su marca con líneas como Emporio Armani, Armani Privé y Armani Beauty, impulsó a grandes modelos y vistió a realeza, artistas, deportistas y cantantes de fama internacional. Su curiosidad, atención a las personas y capacidad de conectar con el público lo convirtieron en una figura respetada y querida en todo el mundo.

“Siempre atento a las necesidades de la comunidad, estuvo activo en múltiples frentes, en especial apoyando a su amada Milán”, destacaba la compañía. Su legado no solo se refleja en la moda, sino también en la cultura, la creatividad y la influencia global de la ciudad italiana como capital de la moda y el diseño.

La capilla ardiente se instalará desde el sábado 6 hasta el domingo 7 de septiembre, abierta de 09:00 a 18:00 horas, en Milán, dentro del Armani/Teatro. Conforme a los deseos de Giorgio Armani, el funeral se celebrará en privado, reservando un momento íntimo para honrar su vida, su trabajo y su influencia en la moda y la sociedad.

Giorgio Armani deja un legado duradero: un estilo inconfundible, un enfoque humanista de la moda y un imperio creativo que seguirá reflejando su espíritu independiente, elegante y visionario. Su nombre permanecerá ligado a la sofisticación, la innovación y la cultura global de la moda durante generaciones.