Adrián Barbón anuncia un nuevo Congreso Mundial de Asturianía en 2026

El Salón de Actos del Ateneo Obrero de Villaviciosa acogió esta mañana la inauguración del IV Congreso Mundial de Asturianía, un encuentro que reúne a UNOS 80 representantes de la emigración asturiana llegados de España, Europa y América. La jornada la abrió con la actuación de la Banda de Gaitas y la bienvenida institucional del alcalde maliayés, Alejandro Vega, la presidenta del Consejo de Comunidades Asturianas, Paz Fernández Felgueroso, y el presidente del Principado, Adrián Barbón.

El primero en intervenir fue alcalde de Villaviciosa, Alejandro Vega, quien recordó la estrecha relación del concejo con la emigración y la huella de los indianos en la historia local. “Esta es también la tierra de quienes hicieron fortuna lejos, pero regresaron para construir escuelas, levantar templos y sembrar oportunidades”, señaló.

Vega compartió además un recuerdo personal: “Os hablo como alcalde, pero también como nieto de emigrantes. Mi abuelo, que marchó a Buenos Aires, volvió 37 años después con acento argentino y el corazón dividido entre dos tierras”.

Tras un emocionado Alejandro Vega, la presidenta del Consejo de Comunidades Asturianas, Paz Fernández Felgueroso comenzó refieriéndose a la profunda carga simbólica del congreso: “Hoy nos convoca un sentimiento que atraviesa océanos y fronteras, un lazo que se mantiene vivo generación tras generación. Asturias no se acaba en su geografía: vive donde vive un asturiano”.

La presidenta del Consejo reivindicó la memoria de quienes partieron con “una maleta pequeña y la dignidad de un pueblo trabajador” y quiso rendir homenaje a los jóvenes descendientes de emigrantes que mantienen sus raíces y proyectan el futuro. “La Asturianía no se impone ni se decreta, se siente, se vive y se transmite. Este congreso es una reafirmación colectiva de lo que somos”, añadió.

El presidente del Principado, Adrián Barbón, centró su intervención en el reconocimiento a la comunidad asturiana en el exterior y en el compromiso del Gobierno autonómico con sus políticas de emigración y retorno. En un discurso cargado de emoción y orgullo, Barbón subrayó que “fortalecer el vínculo con quienes viven fuera es una prioridad de Asturias”. Asimismo, anunció la celebración de un nuevo Congreso Mundial de Asturianía en 2026 y que el Principado financiará a tres personas por entidad - en lugar de a dos - como representación.

El presidente explicó que este refuerzo permitirá mejorar la coordinación y el acompañamiento a los centros y casas de Asturias repartidos por el mundo, así como reforzar el programa RetornAs, una iniciativa dirigida a facilitar el regreso de los asturianos y sus descendientes. “Las políticas de emigración y retorno son parte central de la acción de gobierno”, afirmó.

Barbón aprovechó la ocasión para destacar el cambio de tendencia demográfica en la región. “Hoy viene a vivir a Asturias más gente de la que se marcha. Asturias tiene 19.000 parados menos y 27.000 personas trabajando más que antes de nuestra llegada al Gobierno. Es una muestra de que hay futuro y esperanza.”

Durante su intervención, el presidente también quiso rendir homenaje a la labor de los centros y casas de Asturias, a los que definió como “embajadas sin bandera, pero llenas de afecto, comunidad y memoria”. “Nuestra gratitud hacia los centros asturianos que hacen bandera de Asturias. Son espacios de refugio y consuelo, de identidad y encuentro, donde se guarda nuestra lengua y nuestras tradiciones”, destacó.

Barbón subrayó el papel de la Asturianía como un sentimiento de pertenencia universal, más allá de los límites geográficos: “Asturias no se acaba en su mapa. Asturias vive donde vive un asturiano o una asturiana. Es una identidad compartida, un orgullo común.”

El presidente concluyó su intervención con un emocionado recuerdo a Antonio Trevín, expresidente del Principado y presidente de honor de la Fundación Asturias: “Fue el servidor público que mejor entendió el fenómeno de la emigración y de los indianos. Su legado sigue muy presente en cada rincón donde late el nombre de Asturias.”