Isabel Urrutia agradece a la Casa de Cantabria en Logroño mantener "viva la llama y el sentimiento de pertenencia" a la comunidad

La consejera de Presidencia, Justicia, Seguridad y Simplificación Administrativa de Cantabria, Isabel Urrutia, visitó esta tarde la Casa de Cantabria en Logroño, donde se reunió con la junta directiva, liderada por Alfonso Pérez, y varios socios. Durante su visita, Urrutia destacó la importancia del trabajo realizado por los integrantes del centro para preservar y difundir la cultura, las tradiciones y la identidad cántabras en La Rioja.

"Quiero agradeceros profundamente el esfuerzo por mantener viva la llama de Cantabria en esta ciudad, fortaleciendo el sentimiento de pertenencia a nuestra tierra a pesar de la distancia", expresó Urrutia, quien subrayó el compromiso del Gobierno cántabro de apoyar a las Casas Regionales con recursos y programas específicos.

La consejera se encuentra en La Rioja para participar en un evento del 30º aniversario del Comité de las Regiones de Europa (CdR), del que forma parte la Delegación Española. Aprovechando su estancia, reafirmó el propósito del Ejecutivo presidido por María José Sáenz de Buruaga de mantener relaciones cercanas con los centros cántabros en el exterior.

Urrutia explicó que el Gobierno cántabro ha incrementado un 26% las ayudas destinadas a las Casas Regionales, con una inversión prevista de 467.000 euros para 2025. Estas partidas están orientadas a cubrir actividades culturales, mejorar las infraestructuras y garantizar la sostenibilidad de las sedes.

En el caso específico de la Casa de Cantabria en Logroño, se anunció un aumento del 20% en la financiación para el próximo año, en comparación con los presupuestos de hace dos años. Además, el centro ha recibido más de 5.000 euros en los últimos dos años para renovaciones y mejoras de su sede, ubicada en la calle Labradores, inaugurada oficialmente en 2005.

"Queremos que estas ayudas sirvan para que las Casas Regionales no solo mantengan su actividad, sino que también puedan crecer y estrechar lazos con la sociedad que las acoge", afirmó Urrutia.

El Centro Cántabro en Logroño comenzó su trayectoria en 1987, con las primeras reuniones de cántabros residentes en la ciudad. Su constitución oficial tuvo lugar en 1988, y desde entonces ha desempeñado un papel activo en la integración con la comunidad riojana. Actualmente, colabora en iniciativas sociales y culturales que refuerzan los vínculos entre ambas regiones, consolidando su relevancia como punto de encuentro para la diáspora cántabra.