A mediados del siglo XX, la cultura gallega no existía. Era necesario revitalizar la idea de Galicia, darle prestigio a nuestra cultura y concienciar a las gentes de los problemas de la cultura nacional gallega. Los caminos políticos y culturales de Galicia estaban atrancados. La única salida que se imponía era organizar una política cultural que contribuyese a dignificar la lengua, hasta entonces perseguida, y abrir nuevos horizontes a las nuevas generaciones.
Fue entonces cuando un reducido grupo de intelectuales, militantes del galleguismo, iniciaron el camino. Establecieron una empresa editorial orientada a la revitalización autóctona que decaía ahogada por la presión a que la sometían. La idea fundacional comenzó a desarrollarse. El primer paso fue la creación de la 'Editorial Galaxia S.A.'. Tendría que atender a dos clases de preocupaciones: centrarse en la órbita de los problemas vitales, culturales y espirituales del país y de sus gentes, y ahondar en sus raíces.
El 15 de julio de 1950 se convocó la primera junta general, que tendría lugar el 25 de dicho mes en el Hotel Compostela. Concurrieron a ella escritores, artistas y amantes de la cultura propia de diversos lugares del país. En la reunión se informó de las gestiones realizadas por los promotores de la editorial. Se aprobaron los estatutos y se procedió a la designación de los miembros del consejo de la administración de la sociedad que quedó constituido por: presidente, Otero Pedrayo; vicepresidente, Manuel Gómez Román; secretario, Francisco Frenando del Riego, consejeros y vocales.
El consejo de administración, en su primera reunión, facultó al vicepresidente y al secretario para otorgar la escritura de fundación. Aprobó también un programa de actividades basado en promover y alentar los esfuerzos más valiosos de nuestros escritores, escoger un plan de ediciones que abarcaría reediciones de obras magistrales, creación de una biblioteca, colaboraciones abiertas a las creaciones poéticas y promoción de publicaciones de periódicos.
Comenzaron a dar los primeros pasos del programa editorial y de actividades basados en la colección 'Grial', con el título de Presencia de Galicia, y a continuación comenzaron a editarse una serie de manuales. Pasados diez años desde su constitución, la existencia de Galaxia estaba ya cimentada y su horizonte abarcaba importantes campos de la cultura. En ese período consiguió un nombre y un prestigio que traspasaba los confines del mundo gallego. Gracias a la Editorial Galaxia se dio una recuperación de la cultura gallega.
En los años que lleva funcionando desarrolló una tarea amplia y coherente dado que armonizó el legado del pasado con los más rigurosos esfuerzos del presente. Está despertando entre las gentes mejor capacitadas de Galicia una conciencia de seria preocupación en tomo a los problemas culturales y socioeconómicos de Galicia.
