El calor redujo la producción de miel en las zonas más bajas de Valdeorras

No es un buen año para los apicultores. Las condiciones meteorológicas registradas en la primavera, si bien pueden permitir que en las zonas altas del interior de Ourense y Lugo la producción no sea mala, dependiendo de la flor del castaño, sí amenazan seriamente la cosecha de las comarcas costeras de Galicia y colmenares situados en zonas bajas también del interior gallego. El mal tiempo registrado en la primavera tiró hacia abajo de los eucaliptos. Lo apuntó Ester Ordóñez, presidenta del Consello Regulador de la Indicación Xeográfica Protexida (IXP) Mel de Galicia. “A producción da costa vai ser floxa”, comentó.

En el oriente provincial las expectativas no son nada halagüeñas. Al menos así lo estimaron en la Asociación de Apìcultores de Valdeorras, donde consideran que podrán salvarse aquellas colmenas que estén ubicadas en las zonas altas, por encima de los 600 metros de altitud, donde las abejas aún pueden aprovechar la flor del castaño, pero no en las tierras bajas, donde ya está prácticamente agotada. Las altas temperaturas de la primavera influyeron en la floración. “As plantas non daban nada”, comentó su presidente, Armando Rodríguez. Esta circunstancia obligó a las abejas a tirar de las reservas de las colmenas.

Avispa velutina

Las condiciones meteorológicas no favorecieron al sector apícola, pero sí a una de sus mayores amenazas: la Vespa velutina. Las condiciones registradas fueron las ideales para la reproducción de este insecto, cuya aparición se adelantó más de un mes respecto a otros años, fundamentalmente en las zonas costeras, pues en el interior su presencia llegó con más retraso, aunque también apareció.

En el sector confían en que la meteorología eche una mano en las próximas semanas y que no se registren ni un calor excesivo ni lluvias abundantes. Los apicultores piden temperaturas suaves para facilitar la labor de las colmenas.

No se presume un año bueno para el sector. “Moita xente pensa se vai tirar a toalla”, explicó Ester Ordóñez. La presidenta de la IXP Mel de Galicia y también gerente de la Agrupación Apícola de Galicia, quien considera que el sector puede encontrar una salida a las dificultades que crean la climatología y las plagas en la diversificación de sus productos y no centrar el negocio exclusivamente en la miel. Una opción es la cosmética elaborada a base de miel.

Los apicultores hacen un llamamiento a los consumidores de miel, a quienes invitan a demandar miel gallega. Recuerdan que la polinización solo es posible mediante la apicultura. En el sector apuntan que los productores gallegos apuestan por la IXP Mel de Galicia, si bien, en muchas grandes superficies pueden verse envases con miel de hasta nueve paises, como China, Ucrania o Rusia.