El verano impulsó ventas en el comercio barquense

Agosto es el mes por excelencia para el turismo en Valdeorras. La comarca atrae a numerosos visitantes tanto de Galicia como de otras partes de España. A lo largo de este mes aumentan los eventos festivos en la comarca y la población se llega a duplicar, aumentando sus gastos, según afirman los comerciantes de la zona.

Desde el Centro Comercial Aberto de O Barco, su presidente, Jacobo Arias, confirmó esta tendencia. “Son meses buenos. La gente, cuando viene a O Barco para disfrutar de unos días de vacaciones o de descanso, siempre aprovecha y gasta más. No he preguntado en todos los comercios, pero en general están contentos”. En este sentido, indicó que en sectores como el hostelero o el comercio se viven semanas de gran facturación.

Coincidió con el portavoz del CCA Susana Núñez, gerente de Dulce y Salado. Subrayó que el aumento de visitantes es notable. “Agosto es el mes más fuerte” comentó. Los otros locales de hostelería consultados confirmaron esa tendencia de un aumento del trabajo. Fuentes del sector indicaro que en algunas mañanas “es una locura el trabajo que tenemos”, pues deben atender terrazas.

Daniel Fontán, de Rodillo Veloz, explicó que si bien es cierta la subida de visitantes en la zona, para las empresas de repostería agosto no es el periodo de más ventas. “Hay días en los que sí facturas bien, pero en otros no. Es una temporada de altibajos”. Añadió que épocas como las Navidades, Semana Santa o las fiestas de la Santa Rita o el Cristo son momentos de mayor facturación.

Vital para los negocios

Este incremento en la actividad económica es vital para la supervivencia y prosperidad de muchos negocios locales que dependen en gran medida de la afluencia estacional de clientes.

Otro factor clave que contribuye al auge del comercio en agosto es el regreso de los emigrantes. Valdeorras, como muchas otras zonas de Galicia, ha experimentado históricamente una importante emigración, especialmente hacia otras partes de España y Europa. Son muchos los emigrantes que eligen el citado mes para regresar y disfrutar de las vacaciones en su tierra natal, prolongando su estancia no pocos de ellos hasta el final de las Festas do Cristo.