SUCESO

El conductor que se empotró en una terraza en A Ponte es policía nacional

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photo_camera Un policía local dialoga con uno de los testigos de los hechos. En primer término, el coche del policía detenido.

Hace dos semanas protagonizó otro incidente: desenfundó su pistola en un bar de la calle Valle Inclán

El conductor que empotró su coche, un Renault Megane, en la tarde del pasado sábado contra la terraza del café Hermida, situada en el número 1 de la calle Rey Soto (A Ponte), es un policía nacional; Francisco A.P.,  de 40 años, que está destinado en A Coruña, aunque en la actualidad, según pudo saber este periódico, se encuentra de baja por motivos psicológicos. 

El vehículo colisionó contra una de las sillas y la mesa en las que disfrutaban de una consumición tres personas: dos hermanas, identificadas como M. y M. T.B., de 83 y 68 años, respectivamente, y un varón, E.R.P., de 93 años. Este último, tras el impacto, quedó sobre el capó del vehículo. Los tres, según dio a conocer la Policía Local, acudieron por sus propios medios a un centro médico para ser atendidos de lesiones leves.


Sacó la pistola en un bar


El accidente se produjo dos semanas después de que este mismo policía nacional protagonizara otro incidente. En esta ocasión, en el bar Peregrinus, situado en la calle Valle Inclán. Llegó desenfundar su pistola, aunque uno de los camareros,  ayudado por un cliente, terminó por quitársela. Fue detenido por sus compañeros de la Comisaría ourensana.

Entonces, al igual que en la tarde del pasado sábado en el café Hermida, los síntomas que presentaba eran los de una persona completamente ebria o bajo los efectos de sustancias estupefacientes.

El sábado, el agente se estrelló contra la terraza cuando intenta maniobrar con el vehículo sobre un paso de cebra. La Policía Local lo detuvo al resistirse a realizar las pruebas de alcohol y drogas. Cuando procedieron a su identificación, reaccionó con agresividad y mordió a un policía local en la mano. 

 Al parecer, el arrestado, que ya estuvo hospitalizado, no lleva a rajatabla el tratamiento médico y lo mezcla con alcohol. Ayer prestó declaración en el juzgado y quedó en libertad, pendiente de un examen facultativo. 

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