El pavimento de Trandeiras ve la luz gracias a las obras de consolidación

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photo_camera Imagen en la que se puede ver la pavimentación original que estaba enterrada por la maleza. (Óscar Pinal)
También ha aparecido alguna dependencia que estaba enterrada y una curtidoría de pieles

Cuatro operarios, un arqueólogo y un arquitecto trabajarán hasta finales de año en el proyecto de recuperación y consolidación de las ruinas del Monasterio de Trandeiras. Se trata de una actuación, impulsada por la Confederación Hidrográfica del Miño Sil y el Concello de Xinzo, encaminada a hacer de este conjunto un punto visitable y, sobre todo, seguro, ya que en los últimos meses incluso se llegó a resquebrajar parte de un muro.

Joaquín López, director de obra, explicó que en la zona había mucha tierra y vegetación encima, lo que hizo necesario comenzar a excavar en aras de descubrir más vestigios. “Lo interesante es que están apareciendo, y así esperábamos que fuese, los pavimentos originales. También alguna dependencia del monasterio que estaba totalmente enterrada y que no conocíamos”, precisó López, quien confirmó la aparición de una curtidoría de pieles “bastante interesante y que estaba totalmente enterrada”. 

Otra de las singularidades del conjunto es el buen estado de conservación que presenta su red hidráulica -cerca de 500 metros de canalizaciones-: “Es de los pocos casos que existen”, dice el director de la obra. “Esto tiene un interés muy grande de cara a conocer como eran esas infraestructuras en construcciones de gran tamaño de la época. No existe ni mucha información ni literatura al respecto”, añade. En este sentido, la parte que ya se podía entrever previamente está en muy buen estado, pero, con los trabajos -que están siendo monitorizados por la Dirección Xeral de Patrimonio-, se ha podido ver que también lo está la que discurre por el interior del monasterio y a través de la propia pavimentación. Todo esto permitirá al visitante conocer qué puntos del monasterio disponían de agua, así como sus usos. El entorno del conjunto monacal poseía un conjunto de captaciones y el agua se distribuía al interior del inmueble por las mencionadas canalizaciones. 

Los hallazgos e informaciones se darán a conocer a través de paneles informativos que se instalarán para completar esta intervención. 

El conjunto monacal de Bon Xesús de Trandeiras fue edificado en el Siglo XVI y ocupa una superficie de 2.000 metros cuadrados.

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