El grupo de gobierno de Xinzo (ocho concejales del PP) aprobó ayer en sesión plenaria incrementar un 0,3% las tasas que abonan los vecinos por expedición de documentos, realizar obras, depuración de aguas residuales, abastecimiento de agua, utilización de la vía pública, vados, retirada de vehículos, cursar estudios en el conservatorio de música y posesión de animales potencialmente peligrosos, entre otros impuestos. En los grupos de la oposición (siete ediles) hubo divisiones: los dos del PSOE y el portavoz de Anova Irmandade Nacionalista votaron en contra, los del BNG se abstuvieron y el de Alternativa Popular Galega (APGA) vo
En los grupos de la oposición (siete ediles) hubo divisiones: los dos del PSOE y el portavoz de Anova Irmandade Nacionalista votaron en contra, los del BNG se abstuvieron y el de Alternativa Popular Galega (APGA) votaba a favor.
La subida, que según expusieron los portavoces de los distintos grupos se corresponde con el Índice de Precios al Consumo (IPC), afecta a un total de 27 tasas municipales. El portavoz del gobierno local, Manuel López Casas, la defendió para poder cumplir con el plan de ajuste aprobado en marzo del 2012 a causa de la deuda, cuatro millones de euros, que arrastraban las arcas municipales. Sin embargo, los grupos de la oposición, que en todos los casos calificaron el incremento de 'moderado', consideran que no es el momento para gravar a los vecinos con impuestos dada la situación de crisis económica. En este sentido, los portavoces del PSOE, Anova y BNG incidieron en que dentro del plan de ajuste se suben los impuestos a los vecinos pero, sin embargo, no se está conteniendo el gasto corriente, argumento que fue rechazado por el grupo de gobierno.
CONGELACIÓN
Los grupos de la oposición reclamaron 'congelar' las tasas ante los sucesivos recortes de la Administración Antonómica y Central, pero Manuel López Casas recordó que todos los ediles, excepto el de Anova, habían votado a favor del plan de ajuste que recogía la subida de las tasas municipales.
En la sesión plenaria, grupo de gobierno y oposición coincidieron en dar su apoyo a la creación de una nueva ordenanza municipal, que en este caso afectará a las entidades financieras por los cajeros automáticos que tiene en la vía pública. El Concello les aplicará un impuesto, que según expusieron los portavoces de los distintos grupos, es 'justo' porque ya lo están pagando todos los vecinos a la hora de ocupar con sillas, mesas y andamios la vía pública, según explicó el alcalde, Antonio Pérez. El Concello tiene previsto recaudar 8.000 euros anuales con este nuevo impuesto.
Los ocho ediles del PP rechazaron las mociones que presentaron el BNG, PSOE y Anova sobre el copago sanitario. Los grupos coincidieron en apoyar otra para rechazar cualquier forma de terrorismo y mostrar su solidaridad con el Concello de Beade, en el que recientemente estalló un artefacto casero que ocasionó cuantiosos daños.
Los ediles iniciaron la sesión guardando un minuto de silencio por los mineros fallecidos en León y aprobaron una moción por unanimidad contra la reforma de la Administración Local que tiene en marcha el Gobierno Central.
La subida, que según expusieron los portavoces de los distintos grupos se corresponde con el Índice de Precios al Consumo (IPC), afecta a un total de 27 tasas municipales. El portavoz del gobierno local, Manuel López Casas, la defendió para poder cumplir con el plan de ajuste aprobado en marzo del 2012 a causa de la deuda, cuatro millones de euros, que arrastraban las arcas municipales. Sin embargo, los grupos de la oposición, que en todos los casos calificaron el incremento de 'moderado', consideran que no es el momento para gravar a los vecinos con impuestos dada la situación de crisis económica. En este sentido, los portavoces del PSOE, Anova y BNG incidieron en que dentro del plan de ajuste se suben los impuestos a los vecinos pero, sin embargo, no se está conteniendo el gasto corriente, argumento que fue rechazado por el grupo de gobierno.
CONGELACIÓN
Los grupos de la oposición reclamaron 'congelar' las tasas ante los sucesivos recortes de la Administración Antonómica y Central, pero Manuel López Casas recordó que todos los ediles, excepto el de Anova, habían votado a favor del plan de ajuste que recogía la subida de las tasas municipales.
En la sesión plenaria, grupo de gobierno y oposición coincidieron en dar su apoyo a la creación de una nueva ordenanza municipal, que en este caso afectará a las entidades financieras por los cajeros automáticos que tiene en la vía pública. El Concello les aplicará un impuesto, que según expusieron los portavoces de los distintos grupos, es 'justo' porque ya lo están pagando todos los vecinos a la hora de ocupar con sillas, mesas y andamios la vía pública, según explicó el alcalde, Antonio Pérez. El Concello tiene previsto recaudar 8.000 euros anuales con este nuevo impuesto.
Los ocho ediles del PP rechazaron las mociones que presentaron el BNG, PSOE y Anova sobre el copago sanitario. Los grupos coincidieron en apoyar otra para rechazar cualquier forma de terrorismo y mostrar su solidaridad con el Concello de Beade, en el que recientemente estalló un artefacto casero que ocasionó cuantiosos daños.
Los ediles iniciaron la sesión guardando un minuto de silencio por los mineros fallecidos en León y aprobaron una moción por unanimidad contra la reforma de la Administración Local que tiene en marcha el Gobierno Central.
