Los salones del centro sociocomunitario de Celanova, que ocupa las dependencias de las antiguas cocinas del Monasterio de San Salvador, han visto incrementada su afluencia en estos primeros días del otoño, con la puesta en marcha de los talleres de este trimestre. “Estamos muy contentos con la acogida que han tenido las distintas actividades que hemos propuesto, y que se suman a las que ya había de siempre y otras que tuvimos, en modo de prueba, en primavera”, comenta el director del centro, Manuel Varela, quien desde que asumió la gestión de las instalaciones en noviembre del año pasado, ha tratado de abrir el centro a toda la población, con actividades intergeneracionales de diferente temática y estilo.
Las distintas salas que ofrece este espacio, hasta ahora desconocido para muchos celanoveses, cuentan de domingo a viernes con una amplia programación, además del espacio de lectura y juegos y el bar social. “Yo siempre digo que este es un espacio intergeneracional, donde los mayores tienen una preferencia especial”, incide el director, quien trata de buscar una solución para que todos puedan compartir espacio y disfrutar de las actividades. ”La convivencia es buena. Nosotros queremos que vengan y se sientan a gusto, sobre todo la gente que se acaba de jubilar, que busca cosas que hacer… porque ellos son los que nos garantizarán el relevo generacional”, reconocía Varela.
Realce exterior
El personal que trabaja en las instalaciones calcula que, cada día, entre usuarios del bar y participantes de las distintas actividades, pasan por las instalaciones 200 personas, más del doble que antes de la pandemia. Una cifra que se prevé mejorar cuando finalicen las obras del nuevo parque que el Concello está acondicionando en As Triguerizas y que realzará el acceso principal al centro (hay otro acceso a través del Claustro Barroco).
Un aumento del número de usuarios que constatan desde la propia gerencia del bar del centro social, donde en los últimos meses han visto incrementada la clientela. “Nosotros llevamos poco tiempo, apenas dos años, pero se nota el aumento de gente, y nosotros también. Por las actividades y porque cada vez se conoce más, nosotros somos jóvenes y también tratamos de dinamizarlo, vienen nuestros amigos…”, resaltan.
