Basura, meadas en fachadas y puertas de acceso a las viviendas y la rotura de alguna puerta son la escena que se encuentran los vecinos de las calles Abaixo y Areal, en las inmediaciones de una de las zonas de ocio nocturno en Celanova. Los vecinos llevan años trasladando sus quejas y malestar por esta situación que, con el regreso de las fiestas y el aumento poblacional este verano, se ha convertido en insostenible.
Desde el Concello, el alcalde Antonio Puga manifestaba estar al tanto de la situación y confirmó que ya ha dado traslado del asunto a las autoridades competentes, con el objetivo de incrementar la presencia policial. “Trasladamos a Subdelegación do Goberno e as forzas de seguridade no cuartel da Guardia Civil de Celanova, da necesidade de reforzar a vixilancia os fins de semana e mesmo en calquera outro día que implique unha concentración de persoas” , dijo Puga Rodríguez, quien quiso incidir en que “a falta de civismo de algúns no enturbe a exemplaridade do comportamento da maioría da xuventude”, en referencia a unas fiestas de verano que han contado con la participación de miles de personas sin que se haya registrado ninguna incidencia destacada.
