El Arenteiro sigue a lo suyo

La vida sigue igual, tanto para el Arenteiro como para el Ourense CF. Los verdes ganaron por 1-0 a los de la capital en un derbi que tuvo más emoción que buen juego, en el que el solitario gol de Antón Escobar le bastó al Arenteiro para llevarse tres nuevos puntos y seguir en lo más alto de la clasificación y poniendo un ritmo de puntos que si logra mantener le convierte en firme candidato al primer puesto que da el ascenso directo. Por su parte, el Ourense CF también fue fiel a lo que está ofreciendo en los últimos partidos. Encaja en los primeros veinte minutos de partido y aunque compite bien y no le pierde la cara a los encuentros, no es capaz de revertir una situación que le ha llevado a sumar cuatro derrotas en los últimos cuatro partidos.

El derbi se presentaba con emoción y también con la esperanza de que se pudiera ver un buen encuentro, aunque no suele ser lo más habitual. Tampoco lo fue esta vez, aunque el campo no ayudó. La mañana era gélida y aunque el termómetro marcaba entre tres y cuatro grados, la sensación térmica era menor de ese guarismo. El campo estaba muy resbaladizo y en la banda de enfrente a la tribuna (donde se va a instalar la grada supletoria para el partido de Copa del Rey), estaba blanca como si hubiera nevado. Era hielo. Tras el tanteo inicial en el que los de Rubén Domínguez salieron mejor al verde llegó el primer arreón local. Después de dos saques de esquina que el meta Marqueta sacó de nuevo a córner luego de los remates de Romay de cabeza y Álex Fernández con la derecha, y luego de otro saque de esquina sin consecuencias, dio la sensación de que a los de Rubén Domínguez les costaba cada vez más frenar los ataques locales. Así, llegó el único gol del partido. Álex Fernández colgó con calidad una pelota en el área que remató Antón Escobar con la derecha, salvó bien Raúl Marqueta, pero le cayó el rechace de nuevo a Escobar que esta segunda opción no perdonó y con la izquierda mandó el balón al fondo de la portería: 1-0 a los 18 minutos.

A partir de ahí, la película de otras ocasiones. El Arenteiro contemporizo y durmió el partido y al Ourense CF se le enfriaron las ideas con lo que hasta el descanso, nada importante que mencionar para ninguno de los dos equipos. 

La segunda parte comenzó con una ocasión para Gabri Palmás, pero Diego García salvo el intento de vaselina del de Moaña. Rubén Domínguez sacó a toda su artillería (Sergio Arribas, Amín y Borja Domingo), pero todos los intentos se morían al borde del área local. Al final, el Arenteiro sigue a lo suyo, ganando con seriedad y mucho oficio, aunque esta vez con menos brillo, pero con tres puntos más. El Ourense CF plantó cara, pero se mostró muy inocente al acercarse al área rival y con eso no llega.