Jorge Bermello explica su proyecto e intención de convertir al club en un producto rentable

‘El COB es viable como empresa’

Rondaba los 18 años Jorge Bermello hijo cuando Jorge Bermello padre le dio las llaves del negocio familiar y le dijo: ‘Tómalas, y si tienes algún problema, llámame’.
La historia se repite, aunque con matices. El patriarca dirigió al convulso COB de la temporada 1995-96, colaborando en su feliz permanencia, aquella canasta en Gijón de Darrell Lockhart. 13 años después, su hijo toma las riendas de un club siempre a la deriva, relevo inédito en la trayectoria del deporte ourensano.

Correcto. No es presidente y así lo repite una y otra vez. Al menos hasta que se haga oficial en la asamblea del día 22. Por el momento sólo es Jorge Bermello Arce (1964), próspero empresario, casado y padre de tres hijos. ‘Un trabajador más del COB’, según sus palabras.

Intentará convertir a una entidad ruinosa en una empresa como la suya. ‘Líderes gallegos en electrodomésticos y muebles de cocina, con capital gallego’. El COB hoy es una vieja lavadora, permanentemente averiada. ¿El mayor problema? ‘Reunir 120.000 euros mensuales para su funcionamiento’, explica. ‘De verdad, mi única preocupación desde que acepté este trabajo’.

Asegura que su padre le aconseja de forma permanente. Así es. Escurridizo, mide mucho sus palabras y gestos. Llegó al club y se encontró un poema. ‘Dos trabajadores ejemplares a los que se debía mucho dinero. Deudas a agentes y una mala situación general. Agradezco la colaboración de todos para negociar sus cobros. Vieron algo en nuestro proyecto que les hizo confiar. Es una buena señal’, añade.

El producto COB

Rehuye hablar sobre el pasado del club. ‘Lo único claro son los hechos. Este club generó apenas 60.000 euros y tenía 400 socios reales. Ahora estamos en la LEB Oro. ¿Es viable el COB como empresa? No hay nada imposible. Díficil, no imposible’.

Sale su vena empresarial, vocacional según su opinión. ‘El COB es un producto que no se le ha vendido bien a los ourensanos. Primero hay que asentarlo, sembrar, recibir con los brazos abiertos a toda la sociedad y ofrecer. Después será el momento de recoger los frutos’. ‘No tengo ni idea de baloncesto, pero si algo creo saber hacer es formar buenos y rentables equipos de trabajo’, declaración de intenciones del futuro presidente del COB.

‘No le tengo miedo al cargo ni a las críticas’

Ocupar la presidencia del COB es un buen trampolín, un puesto de prestigio social. También una fuente de quebraderos de cabeza y críticas. ‘No tengo ninguna preocupación por lo que conlleve el cargo. Lo único que me preocupa es la forma de generar recursos para el presupuesto’, asegura Bermello. ‘Las críticas son buenas. Yo prefiero que me critiquen a no suscitar ninguna opinión. Estar en el punto medio no es buena señal’. Las encajará, vengan de donde vengan. No le importa que asocien su negocio o la política a su cargo. ‘Estoy abierto a mejorar. Yo desconozco este mundillo por completo y sé que cometeré errores. Aprendo cada día y me considero bien asesorado por mi equipo de colaboradores, gente muy preparada’.

Otro plato de dudoso gusto es el papel de mediador entre las necesidades del club y el dinero público. Aunque no le gusta profundizar en el tema, Bermello reconoce que los contactos con las administraciones fueron ‘muy positivos’: ‘Le hemos presentado nuestra idea a las corporaciones local, provincial y autonómica. La impresión inicial ha sido estupenda. Yo estoy convencido que los políticos intentan administrar los recursos lo mejor posible. Mi papel nunca podría ser el de ir a pedir las cosas por favor, por caridad. Hablamos de dinero público, y si queremos merecerlo debemos presentar un proyecto serio, sólido, viable y vendible, en el que el dinero invertido beneficie a nuestra sociedad’. Afirma rotundo Bermello. Aquí no tiene dudas.

LOS DETALLES

Economía, deporte y sociedad, pilares del COB

Bermello cifra en estos tres ámbitos los pilares de su proyecto. El económico es el más acuciante. ‘No sé el porcentaje, pero intentaremos generar la mayor parte de recursos propios’, indica. ¿Ourense responde? ‘Hay tejido empresarial para ello, pero no se ha sabido vender el producto COB’, insiste. La pregunta es: ¿viable o no? ‘No hay nada imposible. Si cada ourensano aportase diez euros, tendríamos un señor equipo. Tenemos que involucrarlos a todos y el método consiste en ir puerta a puerta’. Su objetivo es reunir 120.000 euros mensuales para que el club funcione.

‘Esta temporada no va a ser un camino de rosas’

Tema deportivo. Un proyecto de cantera en el que ‘le ofreceremos nuestra colaboración a todos’. Arriba, un primer equipo cuyo único objetivo es ‘la permanencia. Como sea. La plantilla tiene toda mi confianza. Están muy involucrados y cobrarán en función o no de los resultados. Tengo muy claro que si algún engranaje se sale de la maquinaria intentaré encajarlo de nuevo’. Eligió al técnico, Javier Muñoz, asesorado por Alberto Herreros y ‘con la opinión en contra de algunas personas’. Razona su elección ‘por mis referencias, porque es joven, trabajador, ambicioso y gallego. ¿Saldrá bien o no? Bueno, hasta Florentino se equivoca’, subraya.

‘Recibimos a Ourense con los brazos abiertos’

Difícil misión. Recuperar la ilusión de la provincia por el club que fue ACB en su momento. ‘Antes que pedir, tenemos que dar. Le ofrecemos a todos los clubes, asociaciones y entidades de Ourense nuestra colaboración. Vamos a ir puerta a puerta, presentar nuestro proyecto e invitar a todos los ourensanos al Paco Paz’, anuncia Jorge Bermello. La campaña empieza ya.



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