TERCERA RFEF

Derrota clave y sin excusas de la UD Ourense (0-2)

Jesús Ares fue de los jugadores más destacados en ataque del club rojillo en el primer tiempo.
photo_camera Jesús Ares fue de los jugadores más destacados en ataque del club rojillo en el primer tiempo.
El Gran Peña dejó en evidencia las carencias del conjunto rojillo, que a día de hoy está muy lejos de aspirar al ascenso

La caída libre en el juego, las sensaciones y hasta el estado anímico de los jugadores de la UD Ourense y de su propia afición, que nunca falla, pero sólo recibe golpe tras golpe de un equipo que va claramente a menos, es evidente y parece no tener fin si alguien no le pone remedio y con urgencia. Porque al término de esta jornada, el equipo de Jorge de Dios, puede verse fuera de las posiciones de play off de ascenso después de una clara derrota ante un Gran Peña que evidenció las carencias y los problemas en el juego del conjunto rojillo con la ley del mínimo esfuerzo y con eso hasta le pudo golear. 

 Era un partido con mucho en juego e incluso por encima del resultado, con la urgente necesidad de triunfo del conjunto rojillo, de ver el nivel de competitividad del equipo ante uno de los máximos favoritos al ascenso directo y al término del partido las sensaciones no pudieron ser más negativas en todos los sentidos. Al Gran Peña le bastó sestear en el primer tiempo y poner una marcha más en el segundo, pero sin tampoco apretar mucho el acelerador, para tumbar a un equipo que fue de más a menos y que realizó un segundo tiempo impropio de un conjunto con tanto en juego. 

Cierto es que las sensaciones de los primeros minutos fueron positivas porque a nivel de posicionamiento defensivo, control del medio campo y la intensidad del equipo, ganando siempre todos los duelos, le llevaban a tener el control del partido, pero ese control no le bastaba para transformarlo en dominio generando llegadas y ocasiones de peligro en la portería de Vila. A los puntos sí que al descanso merecía ir por delante en el marcador el conjunto de Jorge de Dios si Luismi acierta en un remate claro a pase de Yelco Alfaya o Vila no estuviese acertado despejando un remate de Ares que se colaba en su portería, pero fueron las únicas ocasiones claras en 45 minutos de teórico dominio, con mucho juego posicional y pases horizontales sin profundidad y después de conseguir que el segundo filial olívico no llegase a la portería de Álex Cobo.

Lo que nadie podía esperar y mucho menos explicar es el segundo tiempo del equipo unionista, que perdió todos los registros del primer tiempo y pasó a estar dominado por el Gran Peña y desbordado por la velocidad de Óscar Lorenzo y Óscar Gil, que además de sentenciar el choque con dos goles, pudieron transformar en goleada el marcador en cada jugada que trenzaban. La UD Ourense pasó a perder el control del medio campo, perder todos los balones divididos y sufrir en defensa, con la salvedad del defensa Matovu, que impidió una goleada mayor por su velocidad. 

Los dos goles fueron de igual factura, jugada por banda con desborde y centro preciso al área de Óscar Lorenzo a Óscar Gil, que en el área y sin oposición no perdona. 

No hubo reacción y el equipo suma la quinta jornada consecutiva sin ganar y un solo gol a favor en esas cinco jornadas. 

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