Espiñedo vive otro día grande. El Nástic de Tarragona, un histórico, es el visitante de esta tarde, a las cuatro, en un partido sin duda que estará marcado por la climatología y el estado del terreno de juego, que seguro que desluce lo que se pueda ver.
Llegan los catalanes llamados a disputar el ascenso y con un potencial que también lo demuestra la manera de viajar. En avión llegaron a media tarde de ayer a Santiago, antes de desplazarse a Carballiño. Y a la finalización del partido, nada de autocar para cruzar España, sino que otra vez en avión. Ese es el motivo por el que se juega a las cuatro, y no a las 19:00 horas, que fue el primer horario fijado por la Federación hace meses. Ellos solicitaron el cambio para poder volver el día de partido, y visto el tiempo, casi se agradece, ya que a las siete era bastante más intempestivo para todos.
Un partido con un aroma especial porque en el Nou Estadi jugaron los verdes el primer partido de su historia en Primera Federación, que siempre quedará para el recuerdo. Aunque este se parecerá muy poco al de aquel 24 de agosto, ya que además de los cambios que hubo en ambas plantillas, los de Javi Rey ya se han hecho un nombre en la categoría, todos les respetan y más cuando vienen al “fortín” de Espiñedo, donde tienen que sudar la gota gorda para intentar llevarse algo positivo. Y muy pocos lo logran.
Afrontan los verdes el duelo bastante mermados porque el técnico Javi Rey solo tiene 15 jugadores disponibles, más los tres porteros que conforman la convocatoria de 18 citados. A las ausencias habituales de Adrián Cruz y Marquitos, se les une Vitra, con una fisura en una costilla y que tiene al menos un par de semanas más de baja; Pol Bueso, con una sobrecarga en el sóleo, y Marino Illescas recuperándose de una microrrotura. Así que está semana no tendrá que romperse mucho la cabeza el entrenador y lo más probable es que repita el once que formó la semana pasada en Logroño.
Enfrente un Nástic que llega como tercer clasificado con 46 puntos, sabedor de que si suma los tres puntos, y el líder Ponferradina pierde en Fuenlabrada, se acostarían primeros. El técnico catalán Dani Vidal sabe de la dificultad del partido afirmando que “ellos son un equipo muy fuerte, bien estructurado con una línea de tres medias puntas de mucha calidad y dos carrileros muy ofensivos, sobre todo el izquierdo, que generan mucho peligro, y más en su campo, que será determinante, ya que estará irregular y debemos saber adaptarnos lo más rápido posible”.
