El derbi gallego tuvo un tiempo para cada equipo, pero el Bergantiños fue capaz de marcar y le llegó para ganar
El Ourense CF regresó de vacio de Carballo después de perder por 1-0 ante el Bergantiños, en un partido en el que pagó muy caro un muy mal comienzo.
El Bergantiños arrancó muy enchufado y en los cinco primeros minutos tuvo tres ocasiones muy claras para abrir el marcador, pero Marqueta evitó el gol a remates de Carlos López y Pacheco, mientras que Álex Boedo mandó fuera una ocasión sencilla para marcar. La fragilidad defensiva de los ourensanos era total y en el minuto 6, Carlos López fue más listo que Tafa y Nacho Fariña y logró el 1-0 superando al meta ourensano.
El técnico Rubén Domínguez modificó el 4-4-2 inicial y retrasó a Jerin a la defensa para pasar a defensa de cinco. Lo agradeció le equipo que se fue entonando, pero aun así el cuadro local tuvo ocasiones para haber hecho el segundo.
En la segunda parte cambió la decoración. El equipo ourensanofue otro y pasó a convertirse en el dominador absoluto del juego. Gozó de numerosas ocasiones para cuando menos haber igualado el partido. Pero la falta de puntería y las buenas intervenciones del meta local Santi Canedo, el mejor jugador del equipo de Carballo en la segunda parte, evitaron la igualada. Alberto Gil en dos buenos remates, Rubén Sánchez o Amín tuvieron ocasiones para marcar, pero la más clara fue para Manu Rodríguez en el minuto 73 que remató de cabeza un centro desde la izquierda de Gil. Cuando ya se cantaba el gol apareció una mano milagrosa del portero local para evitar el empate.
