El deporte nacional ha entrado en una fase de desescalada que, como la social y económica, carece también de certezas. Esta semana se antoja clave para que muchos de los equipos ourensanos conozcan el desenlace de sus competiciones y puedan empezar a pensar en la próxima campaña.
El Consejo Superior de Deportes (CSD) pasó la patata caliente a las Federaciones y serán estas las que tengan la obligación de poner orden y sentencia a sus respectivas competiciones.
Así lo recoge una resolución firmada ayer por la presidenta del CSD, Irene Lozano, ante la necesidad de adoptar las decisiones sobre el desenlace de las competiciones frente a la crisis sanitaria de la COVID-19 y conforme a propuesta de la Subdirección General de Régimen Jurídico del Deporte.
Según informó el CSD, la resolución recomienda que sean las comisiones delegadas federativas las que determinen si las ligas no profesionales que no se hayan dado por finalizadas deben o no reanudarse y de poder hacerlo que determinen el momento y formato en el que proceda llevarse a cabo.
En caso de no reanudarse, o pese a reanudarse y no ser posible su conclusión, serán las comisiones delegadas las que deben determinar el orden clasificatorio y, en especial, la fijación de ganadores y el régimen de ascensos y/o descensos para la siguiente temporada.
De esta manera las federaciones serán competentes para decidir cómo dar forma a las clasificaciones definitivas, pero a la vez serán las destinatarias de las demandas que puedan acarrear por clubes o entidades implicadas.
La Comisión Delegada de la RFEF decidirá el jueves qué hacer con la Segunda B y la Tercera División
El documento insiste en que las disposiciones de las comisiones delegadas "serán motivadas", además de "debidamente publicadas", y "se acordarán atendiendo a criterios de objetividad, integridad, justicia deportiva y resultados competitivos".
Un abanico enorme de posibilidades que ya se han ido produciendo en las semanas anteriores en distintas competiciones. Federaciones, como la de rugby, otorgaron títulos, ascensos y descensos en sus respectivas categorías y ya han generado polémica. En la de hockey, el Liceo amenazó ayer mismo con abandonar la liga española, tras concedérsele el título al FC Barcelona sin haber terminado la liga.
Fútbol, el jueves
La decisión de la Federación Española de Fútbol (RFEF) es una de las más esperadas y debería producirse en los próximos días. El jueves está convocada la junta Directiva de la RFEF para una reunión telemática con un único punto de orden en el día: la resolución de las ligas. El viernes, la Comisión Delegada de la RFEF deberá aprobar lo decidido el día anterior.
Hace semanas la RFEF había apostado por la opción de una "final exprés" que implicase a los cuatro primeros clasificados de los grupos de Segunda B y Tercera División, pero esa opción, pese a ser del agrado de muchas federaciones territoriales, ha ido perdiendo fuerza y se ha sondeado ya la posibilidad de conceder el ascenso a los campeones de cada grupo.
El Ourense CF y el CD Barco están esperando noticias al estar implicados en la decisión que se tome. Los dos equipos ourensanos estarían clasificados para jugar una fase de ascenso que ahora podría no disputarse por decisión federativa y sin tener en cuenta un argumento sanitario que se cae al estar previstos para esas fechas partidos de fútbol y de baloncesto.
El fútbol provincial también están pendiente de noticias definitivas, aunque nunca llegarán antes de aclarar qué pasa con la Tercera División.
