Valdeorras está de fiesta. El Barco ganó al Somozas por 2-3 en la semifinal autonómica de la fase de ascenso a Segunda Federación y se enfrentará al Ourense CF en la final, a falta de confirmación oficial, el sábado en el Anxo Carro, en tierras lucenses.
Sabían los barquenses de la importancia del partido y tenían puestas muchas esperanzas en poder pasar una eliminatoria en la que necesitaban ganar, ya que el empate favorecía al Somozas. Con ese pensamiento salieron y tras un primer aviso al minuto con disparo de Óscar Martín arriba, en el minuto dos llegó el primer gol. De nuevo el canario Óscar Martín, que recogió un rechace defensivo, superó al meta Marcos Souto con un disparo desde la frontal que desvió el defensa Quico para el 0-1.
El partido se puso de cara para los de Javi Rey y el gol les dio tranquilidad, aunque no por mucho tiempo. En el 21, un saque de esquina lo remató Rubo de cabeza y puso el empate que daba el pase a los ferrolanos, pero quedaba un mundo.
La segunda parte fue de locura. En los primeros diez minutos el Barco puso de nuevo la eliminatoria a su favor. En el minuto 52, el omnipresente Óscar Martín inició una jugada por la derecha que llevó hasta la izquierda para Víctor Oliver, que sacó un centro chut que el meta Marcos Souto despejó con apuros, la pelota le cayó al canario y su remate lo salvó el defensa Álex Cabarcos, aunque el rechace volvió a llegar a Óscar Martín cuyo segundo tiro lo introducen entre Maroñas y Cabarcos para el 1-2. Y solo cinco minutos más tarde, un error monumental de Pacheco, que cedió la pelota a su portero sin ver que estaba Duque al acecho, propició que el delantero, tras sortear al meta, hiciera el tercero para los de Javi Rey.
Parecía que el partido estaba casi resuelto y más cuando en el 69 Duque perdonó el cuarto cuando solo tenía que empujarla en línea de gol y en el 71 el equipo de Marcos Roca se quedó con diez por expulsión de Manu Núñez.
Pero el Somozas tiró de orgullo y Pablo Rey se echó el equipo a sus espaldas. En el 86, tras una falta del ferrolano que no atajó Aitor Arias, la empujó Asier para el 2-3. Pero el Barco supo sufrir y aguantar para jugar una final histórica.
