El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, anunció ayer que se va a estudiar si se fija un objetivo de déficit distinto para cada autonomía y destacó que si Bruselas flexibiliza la meta para España la intención es compartir con las comunidades la nueva senda. Al término del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), en el que se reunió con los consejeros del ramo de las diecisiete comunidades autónomas, Montoro destacó que la intención del Gobierno 'es conocer si se debe permanecer en un objetivo de déficit único común para todas las comunidades o no'.
Tras recordar que se cerró 2012 con una 'amplísima diferencia' en los déficit de las distintas comunidades, 'se ha abierto un abanico' muy grande, que 'hay que entender como ocasión para otra forma de establecer el objetivo de déficit público', sin prejuzgar ningún resultado'.
Montoro advirtió de que el Gobierno no va a premiar a las autonomías más cumplidoras, ya que la mera reducción del déficit es un 'premio' en sí mismo que revierte en mayor confianza y mejor gestión de la región.
Montoro explicó que en la reunión de ayer se crearon tres grupos de trabajo, con la práctica unanimidad de todas las autonomías, a excepción del País Vasco y Navarra, que se abstuvieron, al contar con una fiscalidad propia. Además del que se encargará de estudiar posibles objetivos distintos de déficit, se creó otro que se ocupará de hacer balance del funcionamiento actual del sistema de financiación y un tercero que se centrará en analizar la reforma de la administración y reducir trabas y evitar duplicidades.
Sobre si existe la posibilidad de poner a las comunidades autónomas 'más cumplidoras' un objetivo de déficit incluso más alto que el que han logrado, el ministro ha dicho que le resultaría 'extraño' y aunque hay que 'estudiar todas las posibilidades' no se debe 'retroceder en la meta'.
Montoro advirtió de que el Gobierno no va a premiar a las autonomías más cumplidoras, ya que la mera reducción del déficit es un 'premio' en sí mismo que revierte en mayor confianza y mejor gestión de la región.
Montoro explicó que en la reunión de ayer se crearon tres grupos de trabajo, con la práctica unanimidad de todas las autonomías, a excepción del País Vasco y Navarra, que se abstuvieron, al contar con una fiscalidad propia. Además del que se encargará de estudiar posibles objetivos distintos de déficit, se creó otro que se ocupará de hacer balance del funcionamiento actual del sistema de financiación y un tercero que se centrará en analizar la reforma de la administración y reducir trabas y evitar duplicidades.
Sobre si existe la posibilidad de poner a las comunidades autónomas 'más cumplidoras' un objetivo de déficit incluso más alto que el que han logrado, el ministro ha dicho que le resultaría 'extraño' y aunque hay que 'estudiar todas las posibilidades' no se debe 'retroceder en la meta'.
