A Mezquita y sus aldeas celebran la Festa dos Reis, en la que la unión es la principal protagonista de este inicio del Entroido de Ourense
La salida de los zamarreiros, en A Mezquita, marca el inicio del Entroido en la provincia de Ourense. La Festa dos Reis es una de las tradiciones más arraigadas en el municipio, y con cuatro días de celebración, los vecinos del lugar y de las aldeas colindantes, celebran esta fiesta pagana en la que el compadreo es protagonista.
Este jueves era el turno de “pedir o aguinaldo”, una jornada que llega después de “cantar os Reis” o probar el vino de la fiesta.
La figura emblemática de esta celebración, el Zamarreiro, recorre las calles de la localidad visitando una a una las casas de los vecinos. Estos los agasajan con víveres y dinero para destinar a los “Reis”. Según cuenta los organizadores, “esta tradición conta con máis de 200 anos de historia, só se parou na Guerra Civil Española e na pandemia do covid”.
Los encargados de gestionar “absolutamente todo, dende a comida ata a contratación da música”, son los reyes y virreyes. Dos chicos y dos chicas, Mónica Luis, Raquel Barja, Toño Estévez y Edu Diéguez son los organizadores durante este 2024. Ellos fueron elegidos hace dos años por los que, durante 2022, llevaron la corona. Y es que la abdicación se hace a dos años vista, garantizando así la continuidad de la fiesta.
Se trata de una celebración que cuenta con una rígida tradición en la que cada uno de los días está destinado a una actividad. Si bien es cierto que hace apenas 5 años las mujeres no formaban parte de este festejo, ahora son una pieza fundamental y cada vez adquieren un mayor protagonismo.
Tradición
El primer día se elaboran los ramos, a base de fruta, higos, nueces, flores o bica, elementos vistosos que presidirán el día del aguinaldo junto a los zamarreiros.
Posterior al “aguinaldo” llega el día de los invitados, donde los amigos y familiares de los vecinos “que entran na festa poden vir a comer ou a cear”. La música recorre durante la mañana de esta jornada las calles del lugar agradeciendo el “aguinaldo” recibido el día anterior. “A Parranda” cierra la fiesta con un desfile presidido por los reyes y virreyes, acompañados de una comitiva engalanada con disfraces y atuendos de Entroido.
Un total de cuatro días en los que, desde el desayuno hasta la cena, los vecinos están unidos. Una fiesta para compartir, donde ahora, hombres y mujeres, forman parte de una de las tradiciones más esperadas del año. “Esperamos con afán estes días e cando rematan, calculamos o tempo que resta para os seguintes”, declara Toño Estévez, uno de los organizadores del ciclo entroideiro.
Se adjudica cada una de las “tareas” entre los participantes de la celebración
La primera noche de este festejo, los encargados de la organización reparten entre los participantes las diferentes tareas para que la fiesta se pueda llevar a cabo.
Camareros, encargados de la música, conductores, zamarreiros o escribientes son algunas de las actividades que “os que entran na Festa dos Reis se teñen que comprometer a realizar”.
Entre las múltiples tareas “encóntrase a de roubar as verzas”, una de las más divertidas y arriesgadas. Varios de ellos tienen por encomienda hacerse con las berzas de algún vecino para la elaboración del caldo. Esta actividad, normalmente, se lleva a cabo por la noche, cuando remata la música.
Los “Reis” continúan en A Mezquita, pero también en Cádavos, A Esculqueira, Chaguazoso o Castromil hasta este sábado. Tras ellos, llegará el Entroido a otras localidades de la provincia como Xinzo de Limia, Viana do Bolo, Vilariño de Conso, Manzaneda o Verín.
