Santiago de Compostela recibió ayer domingo a José Manuel Borrás, un logroñés de 79 años afincado en Huelva que ha completado, tras 30 días, los más de 1.200 kilómetros que separan Málaga, su lugar de partida, de la capital gallega, convirtiéndose así en el peregrino 438.308, lo que supone un nuevo récord anual casi dos meses antes de que finalice el año.
En la Praza de Praterías, el peregrino 438.308 fue recibido por el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y el director de Turismo de Galicia, Xosé Merelles, además del deán de Santiago. José Manuel Borrás se mostró “tremendamente emocionado” por el recibimiento, así como por los regalos y obsequios que le otorgaron tanto la administración autonómica como la Iglesia. “Me siento abrumado, pero muy contento. 1.250 kilómetros es un récord para mí”, manifestó, antes de señalar que los motivos por los que realizó el Camino de Santiago eran religiosos y también por motivos familiares, que no quiso concretar para evitar emocionarse, según explicó.
Hace un mes este onubense emprendió el Camino desde Málaga, por la Vía de Plata hasta Astorga para después enganchar con el Camino Francés. Una ruta que ha reconocido como dura, ya que le tocaron las borrascas de las últimas semanas e incluso nieve en O Cebreiro. “Me voy a acordar toda la vida”, bromeó.
Símbolo del camino
Por su parte, Alfonso Rueda dió la enhorabuena a este peregrino récord y le agradeció que a través de él puedan “simbolizar todo lo que supone el Camino”. “Me alegro mucho de que sea un peregrino como José Manuel: 79 años, más de 1.000 kilómetros, no es su primer Camino, lo hace en esta época del año, viene desde el sur de España... Es el perfecto resumen de lo que son los caminos”, festejó.
A continuación, el titular del Gobierno gallego celebró que se haya alcanzado esta cifra récord de peregrinos a mediados del mes de noviembre y destacó que la cifra de extranjeros ha sido más elevada que nunca, al tiempo que se mantienen caminantes de otras comunidades que “llegaron especialmente en los meses de verano”. Alfonso Rueda reivindicó que el Camino “tiene capacidad de crecer”, pero “haciendo las cosas con ”sentidiño”.
