Dos vecinos de Verín, identificados como D.L.A., de 79 años, y J.C.R., de 61, prestaron declaración ante la Guardia Civil en calidad de investigados como presuntos autores de un delito contra la fauna, tras matar una colonia de murciélagos rabudos (nombre científico Tadarida Teniotis). Los animales están incluidos en el catálogo de especies a proteger.
Los investigados causaron la muerte de un total de 57 murciélagos, que, posteriormente, depositaron en un contenedor de basura, situado en el casco viejo de Verín.
Los hechos ocurrieron a principios de este mes, cuando un vecino encontró los murciélagos en el contenedor. Los agentes del Servicio de Protección a la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) abrieron una investigación, que acaba de concluir con la toma de declaración a los dos investigados, que, al parecer, los mataron a escobazos cuando cambiaban dos ventanas de una casa en la calle Muralla.
Los murciélagos habían tomado como vivienda la caja de la persiana y el falso techo de la casa.
