La Asociación Mulleres Rurais O Cruceiro de Matamá vuelve a estar en activo tras la pausa por el coronavirus. Llega cargada de actividades, desde manualidades a caminatas y exposiciones. Las mujeres lazanas reivindican la vida en el rural.
Pilas cargadas, muchas ilusiones y ganas de llenar de vida el rural y, en especial, Matamá (Laza). Esas son las tres claves en las que trabajan las 42 socias de la Asociación de Mulleres Rurais O Cruceiro, mujeres con “m” de Matamá, el lugar donde muchas de ellas nacieron, se criaron y viven. Y un entorno “único” que no quieren dejar morir.
Tras el “obligado” parón causado por el coronavirus, poco a poco, estas mujeres han reiniciado sus talleres, actividades e iniciativas. Y en fechas señaladas, ellas no se quedan atrás. Con motivo del Día Internacional contra la Violencia de Género (25-N) gritarán “non a violencia de xénero” en una caminata que celebrarán en las próximas fechas, recorriendo nueve kilómetros entre los pueblos de Matamá, Arcucelos y Retorta.
Junto a esta iniciativa, inauguran una exposición fotográfica en el local de la asociación. Bajo el nombre “Un camiño de negro. O luto en Matamá”, una muestra formada por 45 fotografías que versan sobre el luto en niñas, viudas, celebraciones sociales y el día a día. Los recuerdos estarán expuestos en Matamá hasta el próximo 28 de noviembre, acompañados de textos explicativos.
Estas y otras muchas actividades forman parte del día a día de esta asociación, que cofinanciadas con fondos finalistas del Pacto de Estado contra la Violencia de Género y las propias socias, tienen como principales objetivos potenciar la participación social y la calidad de vida de las mujeres en los entornos rurales.
“Este ano temos variedade de actividades, como costura creativa, pandereta, manualidades, ximnasia… Ademais de obradoiros sobre cultura popular, recompilando fotografías, tradicións e saberes que forman parte do patrimonio inmaterial do pobo e que resulta moi enriquecedora, xa que nestes momentos nas actividades hai participantes de entre os 12 e os 80 anos”, apunta María González, presidenta de las mujeres rurales, quien, orgullosa de todo lo que están creando estas vecinas, trabaja por visibilizar los principios y valores de sus compañeras.
De cara a las próximas fechas, estas mujeres con “m” de Matamá programarán nuevas actividades, dirigidas a toda la población. Entre ellas se encuentra una campaña de recogida de alimentos -ahora que se aproxima la Navidad-, la decoración navideña del pueblo, el trabajo de investigación de la cultura de Matamá por medio de la tradición oral y la salida de las Madamas en Entroido. Y es que ellas lo tienen claro: “Faremos todo o que esta nova normalidade nos permita poder facer, é moi importante que no rural haxa vida e unión, que se compartan ilusións”, concluye González.
