A punto de cumplirse un mes del cierre de la instalación, la Dirección Xeral de Patrimonio aún no ha comunicado su solución
En el mes de diciembre del pasado 2017, y en virtud de un convenio suscrito entre el Concello de Monterrei y la Axencia de Turismo de Galicia, el castillo de Monterrei revivió la etapa histórica de la peste española de la segunda mitad del siglo XVII con una serie de visitas teatralizadas que denominaron, para sorpresa del propio regidor local José Luis Suárez Martínez en el mismo día de su presentación, "Negra Crónica". Quizás, el responsable de la idea intentó, con esas dos palabras, resumir la breve historia de la fortaleza de Monterrei de los últimos tiempos, más conocida en los tribunales y en los medios por los continuos avatares que la ejecución del parador en el interior de sus históricas instalaciones ha provocado.
21 DE MARZO DE 1967: TODO EMPEZÓ CON DON MANUEL
El político vilalbés inauguraba el 21 de marzo de 1967 el parador de Verín, que costó 25 millones de los de la época. Llegó a ser referencia hotelera en la provincia, por aquel entonces. Pero acabó convirtiéndose en un negocio penoso para Paradores de España. Lo cerraba, en los últimos años, por etapas, siguiendo las instrucciones del ERTE (Expediente de regulación temporal de empleo) comunicado a las autoridades laborales. Fue cuando Carmen Pardo, directora xeral de Turismo de la Xunta y natural de Verín, propuso revitalizar el parador con la construcción de otro en la fortaleza. Había empezado la crónica más triste de la instalación.
19 DE ABRIL DE 2014: CONTRA VIENTO Y PLATAFORMA
Pocas concentraciones tan populosas se recuerdan en la villa de Verín como las que lograron los miembros de la Plataforma en Defensa do Castelo de Monterrei. Sin embargo, la Administración tenía claro el objetivo y acabó por concluir una obra que ha dado numerosos quebraderos de cabeza a la empresa pública titular de su explotación, Paradores de España.
8 DE AGOSTO DE 2015: LA PROMESA DE LOS ACCESOS
Ni en la previsión de la convocatoria de medios por la visita de Alberto Núñez Feijóo figuraba la palabra inauguración. Pero lo fue: el 8 de agosto de 2015 quedaba oficialmente abierta la instalación, solo meses después de que la Xunta cediese por 75 años el discutido uso hostelero del castillo a Paradores de España. En ese momento, el presidente prometió invertir 600.00 euros en los accesos al mismo.
DICIEMBRE DE 2015: PRIMER TRASPIÉS A LA INICIATIVA
Tres vecinos de Verín pusieron en solfa el acuerdo municipal por el que se le otorgaba licencia a la obra del Parador en Monterrei. El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 2 de Ourense confirmaba, en diciembre de 2015, que dicha resolución "excedía claramente" los parámetros de superficie máxima edificable permitida por la ordenanza, así como el número máximo de plazas hoteleras.
ENERO DE 2016: TODO SE PARÓ CON LA PRIMERA DE LAS CATAS
Con el recurso de la anulación de la licencia de obras anunciado por los demandados (Axencia de Turismo de Galicia), llegaba la primera de las catas arqueológicas -enero de 2016- de las obras adjudicadas por el ente turístico autonómico a una compañía catalana, encargada de mejorar los accesos a la fortaleza. Los más viejos del lugar siempre aseguraron conocer la existencia de una calzada medieval bajo esa capa de rodadura. Y las actuaciones acababan de confirmarla. Varios años antes, cuando el Concello de Verín decidió llevar el abastecimiento y el saneamiento al otro de los accesos al castillo -puerta Sur, hospital de la Trinidad-, los miramientos no fueron tantos y acabaron desapareciendo restos similares a los que ahora se intentan preservar.
OCTUBRE DE 2016: VARAPALO DEFINITIVO DEL TSXG
Con las obras de los accesos en parada y el contrato de la Axencia de Turismo de Galicia resuelto con la concesionaria tras el hallazgo arqueológico que obligaba a esta última administración a ceder el expediente a la Dirección Xeral de Patrimonio, llega la ratificación de una sentencia en primera instancia que confirmaba el incumplimiento del planeamiento urbanístico del Concello de Monterrei en el momento de otorgar licencia para 12 habitaciones. El TSXG (Tribunal Superior de Xustiza de Galicia) ratificaba la falta de autorización administravia para llevar a cabo las obras en su interior.
NOVIEMBRE DE 2017: LAS OBRAS, AHORA DE PATRIMONIO
Los prometidos 600.000 euros del día de la puesta de gala de la instalación hotelera se convirtieron en poco más de 300.000 cuando Turismo inició la mejora de los accesos. Destapada la calzada real, en noviembre de 2017 comenzaban las obras, esta vez ya dirigidas desde la Dirección Xeral de Patrimonio, de mejora de los accesos desde la puerta Norte del recinto amurallado. Y, una vez más, la lógica obligó a paralizarlas.
UN MARTES Y TRECE DE FEBRERO DE 2018
Con los restos de una calzada histórica al descubierto y unos accesos provisionales incómodos para cualquier conductor por su reducido ancho y pronunciada pendiente y ante la imposibilidad de contar con el suministro de gas, Paradores de España toma la decisión de cerrar la instalación. Su central desviaba desde el martes 13 de febrero las reservas al de Monterrei, confirmando que hasta final de año permanecería la instalación del castillo cerrada.
