Un policía local de Carballiño, vestido de paisano, sorprendió en la tarde del pasado lunes a una madre y su hijo robando chatarra en el punto de almacenamiento que gestiona la Diputación provincial en las instalaciones de la Mancomunidade do Carballiño. Los agentes habían sido alertados por el encargado de este servicio, que ya había presentado dos denuncias por el mismo motivo en el cuartel de la Guardia Civil.
La vigilancia resultó efectiva cuando, en torno a las 19.30 horas, el agente se percató de la existencia de un furgón aparcado en la parte de atrás de las instalaciones y vio a dos sujetos cargando el material, que previamente habían sacado del recinto a través de un agujero que hicieron en el cierre.
Hasta allí se desplazó una patrulla que identificó a P.G.B., de 37 años, y a su hijo, E.G.G., de 21 años, vecinos del poblado de A Fontela.
El encargado de las instalaciones reconoció la mercancía y al respecto manifestó que en los últimos tres años, desde que se puso en marca el servicio, han sufrido siete robos, dos de los cuales fueron denunciados. En las cinco ocasiones restantes los ladrones -que no siempre han sido los mismos, según matiza el encargado- fueron sorprendidos y obligados a devolver el material.
El valor total de lo sustraído y de los daños ocasionados en la alambrada ronda los 4.000 euros, según calcula el denunciante.
Hasta allí se desplazó una patrulla que identificó a P.G.B., de 37 años, y a su hijo, E.G.G., de 21 años, vecinos del poblado de A Fontela.
El encargado de las instalaciones reconoció la mercancía y al respecto manifestó que en los últimos tres años, desde que se puso en marca el servicio, han sufrido siete robos, dos de los cuales fueron denunciados. En las cinco ocasiones restantes los ladrones -que no siempre han sido los mismos, según matiza el encargado- fueron sorprendidos y obligados a devolver el material.
El valor total de lo sustraído y de los daños ocasionados en la alambrada ronda los 4.000 euros, según calcula el denunciante.
