El nuevo alcalde socialista instó a la oposición a unir esfuerzos por Carballiño
Los socialistas gobernarán en minoría con 8 concejales en Carballiño después de que las restantes formaciones PP (6 concejales), BNG (2 concejales) y Alternativas Carballiño (1 concejal) se abstuviesen en la sesión de investidura, que tuvo lugar a las 10,00 horas ante un numerosos público que abarrotó el salón de plenos. La votación se hizo a mano alzada y el alcalde saliente, el popular Argimiro Marnotes, fue el primero en manifestar que renunciaba a presentarse como candidato a la alcaldía en aras de facilitar el acceso a la lista más votada.
En consecuencia, Francisco Fumega Piñeiro salía elegido alcalde de Carballiño con los votos a favor de su grupo. Los tres ediles del BNG y AC acataron la forma del compromiso por imperativo legal, mientras que los otros dos grupos, PSdeG y PP prometieron y juraron indistintamente. Argimiro Marnotes, que perdió la alcaldía en estas últimas elecciones tras cuatro años de mandato, entregaba el bastón de mando a Fumega, quien se refería al honor que sentía tras ser elegido, asegurando que sentía también el respaldo de la oposición en la tarea de gobernar. En esa línea, hizo un llamamiento a la participación, "que entre todos unamos esforzos para levar a Carballiño onde queremos".
El nuevo regidor también apuntó que "da transparencia e da participación cidadá faremos bandeira", al referirse a asuntos de especial relevancia para el Concello, como la aprobación de los presupuestos o las mesas de contratación de personal. Fumega concluía su primer discurso como alcalde anunciando que "o noso reto é traballar con humildade, honestidade e con moito sentidiño".
