Más de la mitad de los concellos ourensanos ya tiene el mismo o un mayor músculo empresarial que antes de la pandemia. Un total de 53 de los 92 municipios de la provincia tiene más sociedades activas en 2022 que en 2020, antes del estallido de la pandemia, lo que supone que casi un 60% ha conseguido mantener o incrementar su tejido de empresas. Así lo recoge el Directorio de Empresas y Unidades Locales (Dirce), publicado a finales del pasado año por el Instituto Nacional de Estadística.
La provincia en su conjunto sigue sin recuperar plenamente su número de empresas en relación con la etapa prepandemia, especialmente lastrada por la pérdida en la ciudad, el municipio que capitaliza el déficit respecto a 2020. En el conjunto de la provincia hay, según estos últimos datos del Dirce, un total de 22.373 compañías en funcionamiento, lo que supone 309 menos que las que se contabilizaban en enero de 2020, antes del estallido del covid y el inicio de las restricciones. En todo caso, la tendencia es positiva. Si en 2020 había 22.682 empresas, en 2021 se derrumbó la cifra hasta 22.322, pero en 2022 consiguió escalar a 22.373, revirtiendo la situación en coincidencia con el fin de las restricciones y la paulatina vuelta a la normalidad.
Esta progresiva recuperación va por barrios, pues la ciudad, la más aquejada por la crisis comercial -principal nicho de pérdida de empresas- es todavía incapaz de darle la vuelta a la tortilla, y con 8.787 empresas en funcionamiento, todavía cuenta con 222 menos que en 2020, y, lo que es peor, no mejora tampoco en relación con 2021. Y es que en Ourense capital había en 2020 un total de 9.009 sociedades activas, en 2021 cayeron a 8.806 y en 2022 siguieron disminuyendo, sin síntomas de recuperación aunque a un ritmo más sostenido, hasta 8.787.
En la misma línea están algunas grandes villas, como Verín o Xinzo de Limia, que todavía tienen un déficit de -86 y -59 compañías respecto a la prepandemia. En total, con Ourense, Verín y Xinzo, son un total de 39 los concellos que todavía no han logrado recuperar el músculo empresarial tras estos más de dos años de turbulencias.
En el lado más positivo se encuentran otros 53 municipios, que ya tienen tantas o más empresas que en el estallido de la crisis covid. Son eminentemente de carácter rural, lo que demuestra un plus de resistencia ante la crisis covid. Pereiro de Aguiar (+13), Vilamartín de Valdeorras (+13), Riós (+11), y Coles (+10) son los que más vieron crecer el número de negocios asentados en su territorio.
A la vista de los datos del Directorio de Empresas, está más que claro quiénes han conseguido ganar músculo y quiénes han resultado más afectados por los convulsos meses de restricciones covid. El comercio, bares y restaurantes y la construcción todavía tienen menos compañías que antes de la pandemia y son las ramas de actividad con mayor déficit (también son las que más empleo generan en la provincia), mientras que, en el lado contrario, el sector de las inmobiliarias y las gestorías, así como las actividades de mensajería y los alojamientos son los que mayor crecimiento experimentan respecto a 2020.
El sector del pequeño comercio tiene 195 negocios menos, aunque sigue copando, con 3.782 unidades, la lista de empresas ourensanas. Después, los bares y restaurantes (2.202) tampoco han conseguido recuperarse y tienen todavía 109 menos que antes de la pandemia. En tercer lugar, el sector de la construcción de edificios, que ha perdido 105 efectivos, mantiene 1.953 empresas en activo. Son los sectores que más músculo han perdido, pero también los que tienen mayor peso en la economía provincial.
Las inmobiliarias, que ganan 88 empresas en dos años, las actividades de mensajería, que suman 48, las actividades administrativas de oficina (+30) y los servicios de alojamiento (+25) son los que experimentan una mayor recuperación.
