Los agricultores de Portugal se preparan para cortar la raia este jueves

Un paso fronterizo en Calvos de Randín, cerrado durante la pandemia del coronavirus. (Xesús Fariñas)
photo_camera Un paso fronterizo en Calvos de Randín, cerrado durante la pandemia del coronavirus. (Xesús Fariñas)
Las protestas del sector agrícola llegan a Portugal: los agricultores del país vecino se preparan para cortar "todas as fronteiras" de la raia

Las protestas del sector agrícola se están contagiando por Europa y ahora llegan también a Portugal, con implicaciones directas para la provincia. Varios grupos de agricultores tratan de organizarse para cortar la raia, tal y como avanza este miércoles la prensa del país vecino. El portuense Jornal de Notícias revela que varios movimientos relacionados con el sector preparan bloqueos este jueves en “todas as fronteiras” de la región de Trás-os-Montes, con la que linda la práctica totalidad del sur de la provincia. Los agricultores tras la iniciativa pretendían comenzar los cortes esta madrugada.

El cierre forzado de la frontera está impulsado por el Movimento Civil pela Agricultura, una plataforma recién formada que emitió un manifiesto justificando las razones de su movilización y las exigencias que plantean “con efecto inmediato”. Dicen luchar “por el derecho humano a la alimentación adecuada, por condiciones justas y por la valorización de la actividad”, y además invitan “a toda la sociedad civil a estar presente y a apoyar esta causa que es de todos”.

En este sentido, afirman que los agricultores portugueses “están unidos y preparados para defenderse de la tiranía y ataque permanente a la sostenibilidad, la soberanía alimentaria y la vida rural”. Las demandas de la plataforma instan a establecer ayudas económicas, relajar las medidas ecológicas y “optimizar” la captación de recursos hídricos.

Si los agricultores vecinos cumplen su amenaza de cerrar los pasos transfronterizos, se complicaría la situación para la economía ourensana, que ya se está viendo afectada por las protestas en Francia. Se complicaría la comunicación con Portugal -también quieren cortar el puente de Valença do Minho-, el principal socio comercial de Ourense, a la vez que la problemática en el país galo ya afecta a transportistas y empresas que se ven abocados a circular por desvíos faltos de señalización. También a permanecer detenidos durante largas jornadas que también suponen pérdidas económicas de hasta 600 euros por día y camión.

Te puede interesar