Los profesionales sanitarios de Urgencias informan en la mañana dominical de las intervenciones más destacadas que tuvieron que realizar en la ciudad durante la primera noche sin estado de alarma y sin toque de queda desde el pasado octubre. De 22:00 a 8:00 horas intervinieron en una atención por agresión y una intoxicación etílica. En total hubo 37 atenciones de diversa consideración.
Los bares y taperías abrieron ayer hasta las 23,00 horas y los restaurantes hasta las 01,00 de esta pasada madrugada. Las calles del casco antiguo a las diez y media de la noche estaban a reventar. Los ourensanos vivieron su primera noche sin toque de queda –salvo en Laza y Cualedro, los dos únicos concellos en máximas restricciones– y la ciudad lo notó.
Esta desescalada suena diferente a todas las anteriores. Uno de cada cinco ourensanos ya está vacunado y el optimismo, aunque con prudencia, es la tónica general entre los hosteleros, que en la noche de ayer vivieron las buenas expectativas.