El papa convertirá en santo al mártir ourensano Juan Jacobo Fernández

El próximo 20 de octubre el Papa Francisco canonizará al beato Juan Jacobo Fernández, natural de Moire (Piñor).

La Diócesis de Ourense organizará una peregrinación con plazas ilimitadas para participar en dicha canonización.

Historia

A los 50 años, fray Juan Jacobo se subió al Barcino, vapor que iba a conducirlo a la muerte. Atrás dejaba a su hermano, Ignacio Benito, médico en Celanova, y a su sobrino Marcial, boticario en la misma localidad.

El 9 de julio de 1860, ocho franciscanos y tres seglares fueron martirizados en Damasco (Siria) por su devoción cristiana, a manos de la minoría islamista de los druscos. Entre esos mártires se encontraba el ourensano Juan Jacobo Fernández. Un asesinato que se produjo debido a las tensiones entre distintas etnias y los temores de estas a que el cristianismo continuase creciendo en la región.

El futuro santo fue arrojado desde el tejado de la iglesia, y como no moría, y suplicaba a Cristo con fervor, lo remataron de una cuchillada.

Los Mártires de Damasco, como se les conoció en la posteridad, recibieron su recompensa en 1926, cuando el Papa Pío XI los beatificó.

La catedral de Ourense albergó en 2014 un acto de entronización del beato Juan Jacobo, en el que se honró su imagen con una escultura, obra de Manuel Ramos Corona, que se complementaba con otra imagen, así como una placa que recuerda su martirio.