La Policía Nacional, la Policía Local y los bomberos protagonizaron un operativo de búsqueda desde la tarde de este martes en el río Miño, a la altura de Velle, en su intento de localizar el cuerpo de un joven de 23 años de origen africano, Alassane Gabe Ndiaye, que desapareció sobre las siete. Finalmente, el equipo de buceadores logró encontrar el cuerpo de Gabe Ndiaye en torno a las 17,20 horas de la tarde de hoy.
El joven estaba con un amigo y compañero de trabajo en un saliente cercano a la presa cuando decidieron emprender una competición de nado, según fuentes cercanas a los afectados. Durante su transcurso, la víctima se cansó -o sufrió una indisposición- y comenzó a pedir ayuda. Un hombre que también estaba en el lugar de los hechos le escuchó decir “estoy mal” y trató de ayudarle. Testigos presenciales afirman que llegó a agarrarle de una pulsera, pero, pese al intento, el joven se hundió. Su compañero también saltó al agua para tratar de sacarlo, pero tampoco lo logró.
Alertaron a emergencias y llegó un amplio dispositivo. Policía Local, Policía Nacional, Guardia Civil y bomberos acudieron acompañados de varias ambulancias. Tanto el amigo como el hombre que intentaron salvar al joven necesitaron asistencia médica por el estado de shock que padecían tras lo sucedido.
Mientras los bomberos sacaban las lanchas para hacer una primera búsqueda por la presa, unos piragüistas de un hangar cercano trataron de ayudar con sus embarcaciones, pero las autoridades les impidieron el paso al agua.
Tras casi tres horas de búsqueda, agentes y bomberos se retiraron. La Policía Nacional se hizo cargo de la operación. Este miércoles, el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas se acercó a la presa a buscar el cuerpo del joven. Pese a que llegaron a primera hora, no pudieron sumergirse hasta las 9,00 horas por la temperatura del agua.
