Un camionero de la empresa Transportes Caride de Maside, Sebastiao Borges Merlo, de 30 años, natural de Vila Pouca de Aguiar (Portugal) falleció ayer al volcar el tráiler que conducía en la rotonda de O Piñeiral (San Cibrao) sobre la autovía Rías Baixas. El camionero, que hacía la ruta Vigo-Madrid, abandonó la A-52 en la zona para reparar la batería del coche. El vuelco del camión cortó el acceso desde Ourense a la vía rápida en sentido Madrid, obligando a desviar el tráfico más de seis horas por la N-525.
La rotonda que hay en O Piñeiral (San Cibrao), para enlazar con la autovía Rías Baixas desde Ourense y Barbadás, se cobró ayer la vida de un conductor, Sebastiao Borges Merlo, de 30 años, de la empresa Transportes Caride de Maside. El fallecido es natural de Vila Pouca de Aguiar, localidad portuguesa situada a unos 30 kilómetros de la frontera con Verín, y llevaba poco tiempo trabajando en la citada empresa, según explicó su dueño, José Manuel Caride.
El siniestro se produjo pasadas las tres de la tarde cuando el fallecido, que hacía la ruta Vigo-Madrid con una carga de 18.000 kilos de pescado congelado, abandonó la autovía para solucionar un problema en la batería del tráiler en un taller del Polígono Industrial de San Cibrao. Las causas del accidente aún no están claras. Fue una salida de vía con posterior vuelco y vamos a revisar el tacógrafo para conocer que pudo pasar, explicó el teniente jefe del Destacamento de Tráfico en Ourense, Miguel Ángel Barrios.
El camión volcó cuando estaba girando en la curva en dirección a la N-525. La carrocería taponó el acceso a la autovía en sentido Madrid más de nueve horas, hasta qué una grúa retiró el vehículo, obligando a Tráfico a desviar a los conductores que pretendían acceder a la vía rápida por la N-525.
La cabeza tractora cayó sobre la valla protectora, que atrapó al conductor en el interior. Al lugar acudió una ambulancia, pero el personal sanitario no pudo hacer nada por salvar la vida del camionero, que falleció en el acto. Los bomberos de Ourense y del Polígono Industrial de San Cibrao que tuvieron que cortar parte de la carrocería para rescatar el cadáver.
Este es el sexto fallecido en lo que va de mes en los viales de la provincia. Ayer, el teniente de Tráfico reclamaba prudencia y responsabilidad a los conductores en la carretera para evitar más siniestros.
El siniestro se produjo pasadas las tres de la tarde cuando el fallecido, que hacía la ruta Vigo-Madrid con una carga de 18.000 kilos de pescado congelado, abandonó la autovía para solucionar un problema en la batería del tráiler en un taller del Polígono Industrial de San Cibrao. Las causas del accidente aún no están claras. Fue una salida de vía con posterior vuelco y vamos a revisar el tacógrafo para conocer que pudo pasar, explicó el teniente jefe del Destacamento de Tráfico en Ourense, Miguel Ángel Barrios.
El camión volcó cuando estaba girando en la curva en dirección a la N-525. La carrocería taponó el acceso a la autovía en sentido Madrid más de nueve horas, hasta qué una grúa retiró el vehículo, obligando a Tráfico a desviar a los conductores que pretendían acceder a la vía rápida por la N-525.
La cabeza tractora cayó sobre la valla protectora, que atrapó al conductor en el interior. Al lugar acudió una ambulancia, pero el personal sanitario no pudo hacer nada por salvar la vida del camionero, que falleció en el acto. Los bomberos de Ourense y del Polígono Industrial de San Cibrao que tuvieron que cortar parte de la carrocería para rescatar el cadáver.
Este es el sexto fallecido en lo que va de mes en los viales de la provincia. Ayer, el teniente de Tráfico reclamaba prudencia y responsabilidad a los conductores en la carretera para evitar más siniestros.
