Galicia superó ayer la barrera del centenar de casos de covid-19 en un sola jornada y regresa a la situación registrado dos meses atrás, con 533 casos activos, cifra que no se producía desde el 6 de junio. En un solo día, y especialmente por el pico de contagios en A Coruña que obligó a tomar restricciones en esa área sanitaria, la comunidad autónoma sufrió un repunte global de 112 casos, muy por encima de la cifra de recuperados, que se quedó en 22.
Las alertas se encienden en Galicia, una comunidad que durante las últimas semanas parecía controlar la expansión del virus mejor que gran parte de otros territorios de España, pero que ahora ve con preocupación el mayor aumento de casos en un día desde finales de abril, así como la vuelta de los positivos a las residencias de mayores, en concreto un caso en A Coruña.
Casos por provincias
Ourense, sin embargo, parece mostrar un plus de resistencia, y tras el empuje de los casos en Santiago y Pontevedra, se sitúa ahora como segunda área gallega con menos positivos. En las últimas 24 horas, la provincia registró cuatro nuevos casos aislados y no asociados a los cinco brotes hasta ahora activos. En total hay 37 casos activos, solo más que el área de Ferrol, que cuenta con 6.
Diferente es la situación en otras partes de Galicia. A Coruña tiene la peor situación, con 246 casos, seguido de Vigo (81), Lugo (79), Pontevedra (44) y Santiago (40). Ya por detrás quedan Ourense y Ferrol.
En cuanto a los aumentos diarios, en A Coruña registraron 69 nuevos casos, frente a los 3 más de Vigo, los 7 nuevos de Lugo, 1 más en Pontevedra, otros 5 en Santiago y 1 nuevo contagio en Ferrol. Ourense detectó 4 nuevos positivos.
Evolución en los hospitales
Otro de los aspectos que muestran el empeoramiento de la situación a nivel gallego es el progresivo aumento de la cifra de hospitalizados con el virus. Hay cuatro nuevos ingresados en unidades de hospitalización convencional respecto al viernes y un nuevo ingreso en las UCI. En total, la cifra de hospitalizados se sitúa en 28, de los cuales 3 están en las unidades de críticos. El resto de contagiados, 505, se mantiene a seguimiento domiciliario por parte de los profesionales de la Consellería de Sanidade.
Sin nuevos fallecidos
La nómina de fallecidos se mantuvo ayer sin movimientos, con 133 óbitos acumulados desde el inicio de la pandemia en Ourens y 620 en Galicia. Esas son las cifras tras el fallecimiento de una mujer de 91 años el viernes por la tarde, paciente cero del brote todavía activo en Vilar de Barrio, y que falleció con covid-19, si bien presentaba ya un complicado estado de salud den el momento del contagio debido a otras patologías asociadas.
En Ourense, tres pacientes covid continuaban ayer ingresados –entre ellos el marido de la mujer fallecida el viernes–, ninguno de ellos en la UCI. En una sola jornada se hicieron 182 PCR nuevas, reflejando esos cuatro nuevos positivos. En el global gallego, hay 16,23 casos por cada 100.000 habitantes, por encima de los 13 casos por cada 100.000 habitantes contabilizados en el área ourensana.
Residencias, en alerta
Otro de los motivos de preocupación y que tiene en alerta a los gestores sanitarias es el regreso de los positivos al lado más débil, el de las residencias de mayores. No en Ourense, donde de momento todas las PCR realizadas direron negativo, pero sí en A Coruña, en contreto en la residencia DomusVi Matogrande de la ciudad herculina. Es el primer usuario de estos centros sociosanitarios desde el 30 de junio.
Ahora, tras el alza registrada en A Coruña, las autoridades sanitarias esperan que en unos días surtan efecto las restricciones llevadas a cabo para evitar grandes concentraciones de gente.
En un mes, la provincia pasa de 1 a 37 casos activos de covid
El 9 de julio, hace hoy un mes, la provincia registraba un único caso positivo por coronavirus, y los tres hospitales permanecían libres de covid. La situación sanitaria cambió radicalmente desde entonces: la cifra alcanza ya los 37 casos, se han registrado 6 brotes en diferentes municipios ourensanos y el CHUO atiende a 3 personas hospitalizadas por complicaciones de la enfermedad. Los datos de infectados demuestran que la curva comenzó a empinarse hace apenas dos semanas: el día 29 de julio eran 8 los casos activos en la provincia, mientras que el 30 ya eran 15 los contagiados, tras la aparición de los rebrotes en Baños de Molgas y Vilar de Barrio. En cuestión de días, la cifra de casos activos llega a más del doble y desde el inicio del mes de agosto, los contagios no dejan de aumentar de forma paulatina. El día 1, el número de afectados alcanzaba los 17 y los brotes se mantenían estables, mientras que ayer, día 8, el Sergas contabilizaba 37 casos y un total de 5 rebrotes –Baños de Molgas, Vilar de Barrio, Chandrexa de Queixa, Carballiño y el último, en Avión–. Al número de positivos, además, se le suman decenas de personas que permanecen en cuarentena preventiva tras estar en contacto con contagiados–incluso después de que la PCR haya arrojado un resultado negativo– . Hasta el momento, la mayor parte de los positivos registrados en el área sanitaria ourensana se han contagiado en reuniones familiares, por lo que las autoridades sanitarias recuerdan la importancia de mantener el protocolo de seguridad.
